En la asamblea realizada por los trabajadores del Hospital del Milagro se puso de manifiesto ante las autoridades la negativa a atender a los pacientes que presenten alguna adicción. Estos drogones te quieren cagar a piñas, dicen que dijeron los médicos.
A mediados del mes pasado, desde la Asociación de Profesionales del Hospital Señor del Milagro (Asprhom), alertaron sobre las situaciones con las que se encuentran cotidianamente cada vez que es internado un paciente adicto a los estupefacientes. En una nota del Tribuno se relataba un episodio particular: “El doctor Julio César López estaba de guardia y a la una de la madrugada fue llamado a la sala por la enfermera. Había un joven en tratamiento de desintoxicación al que no podían controlar porque estaba en una situación de excitación psicomotriz. Hubo un intento de reducirlo farmacológicamente y el médico recibió amenazas: «Ahora vas a ver, porque sé dónde vivís’”, relató el Dr. Ojeda García, miembro de Asprhom. Agregó que una vez reducido este paciente, otro enfermero efectuó una requisa en la sala donde estaba internado y pudo hallar alcohol, pipas y otras drogas. Además acusaban a los familiares de los pacientes porque, según palabras del médico Juan Mena “Tenemos un servicio de portería que es inexistente en sus funciones, por eso esto es tierra de nadie. Vienen los familiares de los adictos trayendo la droga y están en el patio fumando marihuana”.
Otro punto de importancia para esta negativa es la falta de un espacio físico destinado especialmente para este tipo de pacientes, por lo que los trabajadores anunciaron que en las próximas semanas van a continuar las asambleas para analizar las respuestas que obtienen de las autoridades.