Este año Salta será sede del Encuentro Nacional de Mujeres. Una agenda marcada por femicidios, violaciones, trata y prostitución se impone en la provincia que albergará a más de 20 mil mujeres que durante tres días discutirán sobre las problemáticas de género. (Andrea Sz)
Salta se invadirá de mujeres de todo el país y de diferentes territorios durante los días 11, 12 y 13 de octubre, y aunque la imagen se repite todos los años en diferentes provincias cada ciudad posee sus propios desafíos. La última vez que el Encuentro se realizó en Salta fue en el año 2002, en aquel entonces participaron más de 10 mil mujeres que salieron a las calles a reivindicar sus derechos pese a la gran negativa que impuso la iglesia católica.
Hace 12 años, las mujeres católicas salteñas se organizaron para “confrontar” al Encuentro, tal como lo definieron en un comunicado: “Viendo la necesidad que las mujeres católicas participemos en dicho encuentro… Le pedimos tenga a bien invitar al menos 10 mujeres de su comunidad, que fieles a su bautismo y con profundo amor a la Iglesia, se sientan movidas a intervenir en dicho encuentro para testimoniar la defensa de los derechos de la mujer y de la vida desde una perspectiva cristiana. Dado que este evento no es una instancia de formación sino de confrontación donde deben quedar claros y bien fundamentados los principios de orden natural que dignifican a la mujer, será necesario enviar mujeres con cierta formación en el tema del taller que elijan para participar”.
La tensa relación de la Iglesia Católica y los Encuentros de Mujeres es histórica, y será este año uno de los puntos más controversiales; Salta es considerada una provincia altamente católica, además de notoria la relación entre el gobierno provincial y la iglesia. El comunicado de las mujeres católicas, lejos de querer instalar una postura o debate, pone de manifiesto su deseo de querer “quebrar” los Encuentros.
Por otro lado, es importante mencionar ciertas diferencias de criterios según los sectores. Es así que por ejemplo, dentro de la Comisión Organizadora de Salta de este año, el Plenario de Trabajadoras vinculado al Partido Obrero, en conjunto con otras organizaciones como el Foro de Mujeres redactaron un documento que insta a “abrir el debate en la Comisión Organizadora del XXIX Encuentro Nacional de Mujeres en Salta. Consideramos que la tarea de la Comisión Organizadora (COENM) no es solo su organización efectiva sino la posibilidad de la organización de una herramienta de lucha, que puede permitir avanzar en dar una feroz batalla por conquistar lo que es nuestro. Por todo esto, proponemos que la COENM lleve a fondo una discusión que movilice a las mujeres salteñas en especial y a las de todo el país que se unan en esta consigna para dotar al ENM de un qué y un para qué”.
El escrito fue rechazado en la reunión plenaria. Ya que las bases del Encuentro son la construcción colectiva. Tanto en las comisiones como en los talleres no se vota, porque el voto es considerado un método patriarcal, aquello que se intenta combatir. Asimismo es sabido que en las comisiones no se discuten documentos, ya que están integradas por mujeres de diferentes partidos políticos e ideologías, y lo que se busca es generar espacios para debatir libremente.
Un Encuentro para tod@s
De los Encuentros participan mujeres de diversas organizaciones; lo que se intenta es generar un espacio de debate que incluya todas las miradas sobre la mujer y pese a la oposición que existe en que la Iglesia participe de ellos, hay un movimiento católico que desde el año 1993 lucha por la equidad de género contrarrestando los fundamentalismos católicos. El grupo Católicas por el Derecho a Decidir forma parte además de una red Latinoamericana conformada por más de 10 países.
Con respecto al colectivo de mujeres trans y Lgtb y su participación en los Encuentros, una integrante y activista salteña, Pía Ceballos, manifestó a Cuarto Poder: “Hace tres años cuando quisimos participar del Encuentro Nacional de Mujeres no nos permitían porque algunas mujeres no estaban de acuerdo de que hayan trans, pues a través de la aprobación de la ley de identidad de género, nos fuimos incorporando a muchos espacios de participación ciudadana. Este año lo esperamos con muchas expectativa y entusiasmo en Salta ya que no solo trabajaremos en comisiones de trabajo, sino que podremos mostrar al resto de las mujeres argentinas, el caso particular que sufrimos las chicas trans con respeto a la violación de nuestros derechos”.
En este sentido agregó que las políticas públicas a nivel nacional no se reflejan en nuestra provincia: “Lo que si se viene haciendo en Salta desde hace tres año es diálogo y más diálogo ¿cuándo habrá acción? Esta y muchas interrogantes y propuestas de las chicas trans serán expresadas en un encuentro donde insistiremos con exigir el cumplimento de las leyes, exigiendo trabajo genuino y no un curso de peluquería”, finalizó.
Discusión urgente
Según relevamientos no oficiales desde 2008 hubieron en Salta 78 femicidios. Esta problemática que debe afrontar la provincia, será uno de los temas que más se discutirá en el próximo encuentro.
En Salta ha crecido en forma alarmante el número de femicidios; nuestra provincia ostenta el tercer puesto en la media nacional.
El último caso de femicidio se dio esta semana en Joaquín V. González, un hombre de 34 años fue detenido luego de que el juzgado interviniente lo implicara directamente por la muerte de su pareja, María Albornoz, de 27 años, quien había sido encontrada la madrugada anterior sujetada por una soga a un tirante. El hombre declaró haber tenido una discusión con ella, su relato además presentó varias incoherencias. El médico legal estableció que el deceso se produjo debido a asfixia por ahorcamiento presentando politraumatismos, contusiones y equimosis múltiples, el magistrado ordenó la detención del hombre por el delito de supuesto homicidio.
En la misma semana, solo 4 días antes de este hecho, Silvia Liliana Romero (46) fue asesinada por su pareja en la madrugada del 19 de febrero en Campo Santo. Su concubino, Julio Flores (51), la asesinó y luego se ahorcó.
En provincias como las nuestras se ha agudizado la feminización de la pobreza, miles de mujeres solas, cabezas de familia, con sus hijos a cargo son las principales víctimas de ella, tal como se señaló en la fundamentación que se leyó en San Juan para invitar a todas a que el Encuentro se haga en Salta. Por eso esta será una oportunidad importante para visibilizar en conjunto a la mujer salteña y sus problemáticas.