Los trabajadores del ingenio San Isidro podrían torcerle el brazo al poderoso Grupo Gloria S.A. controlante de la histórica compañía azucarera que alguna vez perteneció a los Cornejo. (G.T.)
Por lo menos así se desprende de las declaraciones de su referente gremial Mariano Cuenca que, tras participar de una nueva reunión en el ministerio de Trabajo de la Nación, aseguró que “las negociaciones van avanzando”.
En efecto, el pasado jueves se realizó la segunda audiencia de conciliación y se avanzó en los pedidos de los trabajadores. “Está casi todo hablado y casi todo acordado, sólo falta la cuestión de los surcos”, detalló el dirigente gremial a Cuarto Poder. Cuenca hace referencia al pedido de reducción de los surcos de caña de azúcar que cada obrero debe trabajar que la empresa se negaba a implementar y que ahora considera para la próxima campaña. El resto de los planteos laborales -pase a planta permanente, recategorización de operarios, transformación de contratos eventuales en transitorios, entre otros- están prácticamente resueltos y no habría problemas para continuar con la zafra azucarera iniciada en medio de la conciliación obligatoria dictada por la cartera laboral. Como se recordara, el conflicto está a punto de cumplir los dos meses de duración e incluyo violentos enfrentamientos, balaceras, denuncias penales y amenazas de todo tipo.
De confirmarse, en la reunión prevista para el 5 de junio, la total aceptación empresarial a estos planteos laborales, los trabajadores de San Isidro alcanzarían una clara y contundente victoria. Cuándo comenzó el conflicto, hace más de 50 días, la afirmación del sindicato era que “no es un reclamo salarial sino por mejores condiciones laborales”. “Queremos que los peruanos que manejan la empresa cumplan con las leyes argentinas”, aseguró entonces Cuenca. Ahora, parece posible ese reconocimiento de las condiciones de trabajo garantizadas por la legislación nacional.
El capitulo salarial, sin embargo, también está en la agenda de trabajadores y empresarios del azúcar y excede al ingenio ubicado en Campo Santo. Ocurre que todo el sector se encuentra en discusiones salariales sin llegar a un acuerdo por el momento. “La semana pasada las empresas ofrecieron un aumento del 27% que fue rechazado pero repitieron esa oferta en la última reunión”, explicó Cuenca y advirtió que de no recibir una propuesta superadora podría declararse un plan de lucha en todo el país. “Si no tenemos una oferta mejor, lamentablemente, puede haber una huelga en todos los ingenios a partir del 12 o 13 de junio”, anticipó el joven dirigente gremial.