La gestión capitalina, encabezada por Titi Romero, puso proa hacia el distrito más rico del país con lo que marcó diferencias respecto a su homóloga provincial e intentó dejar atrás un mal trago. Este martes, la propia Jefa Comunal relató el cónclave de su Gabinete ampliado que se reunió en el Centro Cívico Municipal con pares de la administración porteña de Horacio Rodríguez Larreta.
Según lo que publicó TR en su cuenta en Twitter este mediodía, el objetivo de este encuentro es “hacer de la Ciudad de Salta un lugar donde las mujeres, jóvenes, niños y todos sus vecinos vivamos mejor”. La alcaldesa hizo este anuncio con el destacado de #gobiernoenacción con el cual le hizo frente a ciertos cuestionamientos que apuntaron sobre un cierto remoloneo en la resolución de expedientes de rutina.
En este contexto, la titular del Ejecutivo comunal ponderó que en los primeros 50 y pico de días que lleva en la gestión, sin embargo se dio tiempo para dichas tareas mancomunadas con el rodriguezlarretismo en torno a “proyectos de gestión, transparencia y mejora de procesos”.
Muerde como el Apache
En la víspera, Romero había tenido un cruce con una empleada de la Cooperadora Asistencial capitalina, en medio del acto de asunción de Daniel Amador como nuevo Secretario de Hacienda. Al ser consultada, de improviso, por esta agente pública municipal la alcaldesa casi pierde la línea de modales y templanza. Y al día siguiente tuvo su posibilidad de rectificar este paso en falso.
En efecto, este martes publicó una sucesión de mensajes que esta ex empleada de la Cooperadora Asistencial, Analía Tévez, le envió con posterioridad a este incidente ocurrido horas antes en el CCM. O al menos así lo dejó entrever una publicación hecha por Romero en Instagram.
De acuerdo con este aparente contacto por privado, Tévez rogó por una respuesta de la Jefa comunal en cuanto a la situación de los trabajadores de la entidad asistencial de calle Buenos Aires al 700. Según esta captura de pantalla, AT dio un viraje de 180° en comparación a su actitud firme que puso en evidencia en el CCM 24 horas antes y comenzó pidiendo “mil disculpas por eso”.
A lo que Titi, magnánima, respondió que “no hace falta pedirme perdón” y aseguró que su gestión irá en la misma dirección planteada por el marketing capitalino, predicativo de una gestión abierta a la comunidad. No se trata del descubrimiento de la Teoría de la Relatividad, ciertamente, pero esto le dio pie a que la alcaldesa lamentara a quienes “son usados políticamente” al efectuar dichos reclamos por fuentes laborales que fenecen. Finalmente, Romero afirmó que entiende que “ustedes necesitan respuesta y quédate tranquila que vamos a seguir trabajando junto al Gobierno de la provincia para llegar a una mejor solución”.