Esta semana se conocieron los montos que el gobierno provincial le entregará a dos colegios privados. Los mismos pertenecen a un proyecto educativo cristiano de una misma familia. Según describen sus directivos, trabajan en conjunto con la Universidad Austral ligada al Opus Dei. (Andrea Sztychmasjter)
“El golpe militar del 4 de junio de 1943 impuso la enseñanza religiosa en las escuelas públicas. El primer gobierno de Juan Domingo Perón le dio fuerza de ley en 1947 y la anuló en 1954 al romper relaciones con la cúpula eclesiástica. Sin embargo, esa ruptura dejó vigente otra norma que había promulgado el mismo gobierno: el otorgamiento de subsidios a la educación privada destinado al pago de los salarios docentes”, señaló el diario Pagina 12 en una nota de 2007 en donde describen cómo la Iglesia católica es la mayor subsidiada educativa del país.
En Salta a través de un decreto del entonces gobernador Juan Carlos Romero se estableció el método de cálculo de los aportes estatales a instituciones de gestión privada. Se trata del decreto 1920/05, donde se aclara que ese cómputo se hizo mediante “la aplicación de una fórmula polinómica cuyo resultado económico derivaba en la aplicación de factores diversos de naturaleza general y específicos”. En su actualización, el citado decreto establece que “el cálculo de los aportes que corresponde percibir a las Unidades Educativas Públicas de Gestión Privada se efectuará sobre la base del costo real de las plantas funcionales autorizadas por la Dirección General de Educación Privada, de conformidad a lo establecido para el pago de sueldos del personal docente”.
Esta semana se publicaron los montos de los subsidios a la enseñanza privada que el gobierno de Juan Urtubey entregará a dos colegios de altas cuotas y de mucha religión. Para solicitar estos subsidios los representantes legales o directivos se basan en el Art. 75 de la Ley N° 7546 de Educación de la Provincia, el mismo consigna: “La asignación de aportes por parte del Gobierno de la Provincia destinados a atender los salarios docentes de los establecimientos educativos de gestión privada reconocidos, estará basada en criterios objetivos de justicia social, teniendo en cuenta la función social que cumple en su zona de influencia, el tipo de establecimiento, el proyecto educativo o propuesta experimental y el arancel que se establezca”.
Por decretos publicados en el Boletín Oficial, el gobierno provincial oficializó esta semana “aportes” económicos al colegio “Sagrado Corazón Luz y Guía” de la localidad de San Lorenzo chico. El colegio Católico, que cobra una inscripción que ronda los $6000, recibirá $443.860 mensuales gracias al decreto N° 390.
En tanto, a través de un decreto del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, se supo que el Colegio privado Nº 8174 “San Carlos” de la localidad de Joaquín V. González, obtendrá del Estado $107.213,05 para el periodo lectivo 2019. En el decreto se detalla que el Representante Legal de la Institución Educativa que solicitó ayuda estatal es el señor Luis Fernando Salinas.
Fue el propio Salinas quien contó que las sucursales de los colegios que poseen en Metán, Joaquín V. González, Capital y en San Lorenzo Chico se deben a una “historia de vida, una historia de familia”. Según una fuente consultada, la familia Salinas se encuentra conformada por numerosos profesionales del ámbito judicial y educativo: Juan Manuel Salinas es defensor oficial penal, Inés Salinas fiscal penal (dicen que no se encarga de ningún colegio), Luis Fernando Salinas (ingeniero y se encarga del colegio de Salta), Fernanda Rosario Salinas (se encarga del colegio de Metán).
En su página web oficial, el colegio se declara como una institución comprometida en la formación Católica Apostólica, Romana, y su objetivo es “preparar para el futuro a los alumnos y sus familias, el personal auxiliar y administrativo, docentes y directivos que comparten un mismo proyecto educativo y unen sus esfuerzos para hacerlo realidad bajo la luz de Cristo”.
Educación privada para pocxs
Luis Fernando Salinas tiene en claro qué significa la educación privada. Contó que su madre fue docente de toda la vida y al instalarse en Metán tuvo “la idea” de iniciar con la educación privada: “En aquellos años (hace más de 50) era una novedad, era transgresor”. Luego instalaron sucursales de este proyecto educativo que se lleva a cabo en conjunto con la Universidad Austral -institución ligada al Opus Dei- en diferentes localidades de la provincia. “Ellos nos prestan mucha asistencia profesional y en la parte de proyectos de medianos y largo plazo tenemos el apoyo de asesores de la Universidad Austral”, describió.
Según detalló, el colegio es de jornada simple para permitirle a los chicos volver a sus casas y vivir momentos con sus familias “para terminar formándose como personas de bien en los lineamientos de cada familia”. Además aseguró que el proyecto educativo posee muchos valores: “vivimos con la fe cristiana que nos permite saber que nuestra historia es una historia de salvación”, describió.
Según la web oficial de la universidad privada, “San Josemaría inspiró la creación de la Universidad Austral. Con el mismo impulso inicial, hoy el Opus Dei asiste a la Universidad en incorporar los principios cristianos en la enseñanza, en sus contenidos e incluso en el modo de gestionar la Universidad”.
En el caso de la sucursal del colegio de San Lorenzo Chico -que recibirá casi medio millón de pesos- abrió sus puertas en el año 2017 y comprende además de esa zona La Aguada, San Luis, La Almudena, El Tipal y San Lorenzo. “Hemos estudiado durante dos años la zona, con gente que ayudó de la Universidad Austral, hay muchas familias jóvenes que se instalan en la zona con muchos niños chicos”, manifestó Luis Salinas en su inauguración y agregó: “Ni te cuento en cinco años lo que va a ser”. Ahora con este “aporte estatal” sabemos de qué hablaba.
Ver video: Luis Salinas, Director Colegio Sagrado Corazón. Fuente: El Intra
Aclarando oscureces
La titular de la cartera educativa Analía Berruezo al ser consultada por el desembolso de dinero que realiza el gobierno provincial, mencionó: “Primero no es un subsidio, es un decreto como a la educación privada en general se le da un aporte, ese aporte tiene que ver con que colabora la educación privada en relación a la puesta en funcionamiento de un edificio y una serie de acciones que forman parte de la educación no solamente salteña sino de todo el país y es 400 mil pesos por mes y que tiene que ver con una parte de aporte para los docentes que trabajan allí”. Y agregó que Educación tenía las partidas presupuestarias aprobadas y revisadas por la Cámara de Diputados y Senadores, donde están incluidos los fondos para la educación privada. Fue así que la ministra, mediante muchos conectores, avaló los aportes estatales a colegios católicos.
Según el último registro, del año 2005, el Ministerio de Educación de Salta contabiliza en la provincia 160 colegios e institutos de educación privada. De estos, alrededor de 50 son católicos, administrados por el Arzobispado de Salta bajo el Consejo Provincial de Educación Católica (CoProdEC).
Pese a que dicen respetar valores humanos, en medio de la crítica pública que se produjo al conocer los excesivos montos destinados a instituciones privadas católicas con cuotas impagables para la mayoría de las familias salteñas, también salieron a la luz casos de discriminación producidos por lxs directivos de las instituciones familiares. Una mujer contó la discriminación que sintió cuando al querer inscribir a su hijo tuvo que contar que era madre soltera. La educación en Salta sigue siendo materia pendiente.