Amar en tiempos de crisis sociales, el poliamor y la monogamia en esta entrevista con el Licenciado en Psicología Juan Matías Arroz. (Andrea Sztychmasjter)
¿Qué se puede decir del amor desde la psicología?
El amor como concepto psicológico abarca muchas definiciones y muchos aspectos, y casi podemos decir que existen tantas definiciones de amor como personas, ya que tiene mucho de subjetivo, está conformado por un conjunto de emociones variables, es de carácter intenso y no siempre las mencionadas emociones son agradables a veces pueden por el contrario ser muy dolorosas desde el punto de vista emocional. Pero sí de ponernos de acuerdo se trata podemos decir que abarcando generalidades, el amor puede definirse en el fin último como una necesidad de recibir y brindar protección y fundamentalmente compañía, si esto último puede darse de manera equilibrada entre dos personas, tendremos uno de los vínculos amorosos más puros, hablando aquí de casi cualquier tipo de vinculo (familiar, amistad, de pareja etc.). Lamentablemente no siempre están en equilibrio y cuando se trata de un vinculo de pareja la cuestión casi siempre tiene a uno de los dos por encima en determinado momento, alternándose momentos en los que recibimos más y momentos en los que recibimos menos. Para poder forjar vínculos de amor mas asertivos es necesario un preciso conocimiento de sí mismo para conocer la mejor forma de compatibilidad con los otros. También para finalizar podemos decir que existe un concepto de amor propio que si bien no difiere mucho del anterior ya que se trata de aprender a protegerse (en todo ámbito) y estar solo (en compañía de sí mismos), es más un concepto de autocuidado e introspección que abarca también otras aristas.
¿Por qué es necesaria la desmitificación del amor romántico?
El amor romántico como tal, como lo conocimos en la literatura, el cine u otras manifestaciones artísticas que en sí no son más que un reflejo de nosotros mismos sufre en la actualidad un proceso de crisis, o tal vez podríamos decir más precisamente un proceso de cambio, de transformación, ante la aparición de nuevas formas de vinculación que sin embargo recién aparecen de manera incipiente puesto que tienen mas prensa que sostenimiento en la realidad. En última instancia se continua demandando el mismo amor y exclusividad que en tiempos anteriores. Sí podemos decir que el aspecto más cuestionado del amor romántico en la actualidad es su durabilidad de aquel primitivo “para toda la vida” se pretende virar hacia el “vive el momento” (aunque prescindiendo de las consecuencias de esa frase) casi este ultimo como un concepto mas bien prestado de la publicidad y el avance de las telecomunicaciones. Lo más cierto en este punto es que en la actualidad se ha perdido la noción de responsabilidad en la construcción de vínculos amorosos, se observa que se demanda y reclama más de lo que se trabaja para conseguir lo deseado, casi como si el otro fuera una empresa de telefonía que no brinda el servicio que necesito, tanto en un tiempo pasado como en la actualidad para la construcción de un vinculo amoroso reconfortante se precisa de dos personas haciéndose responsables, aprendiendo y construyendo un vinculo, el amor lejos de encontrarse a la vuelta de la esquina o en una red social “de repente” se construye de a dos, implica trabajo personal (autoconocimiento) y conjunto (conocimiento del otro) lleva tiempo y generalmente los mejores resultados se ven a largo plazo.
En tiempos de crisis económicas y sociales ¿qué percepciones se contemplan del amor?
Somos seres que elegimos vivir en sociedad, así somos directamente influenciados por los malestares que las crisis tanto sociales como económicas generan. Las crisis económicas en particular generan crisis sociales ya que crean necesidades y aumentan desigualdades, el amor no escapa a estas variables. Así durante estos periodos, las personas tienden a mantenerse más irritables y por ende más intolerantes, a su vez las carencias nos hacen percibirnos más vulnerables acrecentando la necesidad de protección, por lo que las demandas de cariño se vuelven más frecuentes como así también la discusiones.
Otro punto negativo de influencia de las crisis económicas es que se reducen los tiempos de esparcimiento conjuntos, sea por aumento de horas de trabajo o por reducción de presupuesto para salidas u otras actividades, y debe decirse como mencionamos antes que el amor es una construcción que requiere de espacio y tiempo juntos, así que en tiempo de crisis se debe saber que se necesitará del ingenio para que esos momentos no se acaben con el dinero.
Pero no todo es negativo existe también una variante en tiempos de crisis que puede, generar que el vinculo amoroso se profundice si se trabaja conjuntamente en la superación de esta y si se logra servir de apoyo y encontrar un lugar donde apoyarse, hasta alcanzar una mejor posición, así si bien es menos frecuente en ocasiones las crisis logran que encontremos apoyo donde no lo esperábamos.
¿Qué tópicos se plantean en los tiempos actuales respecto al amor?
Actualmente el amor enfrenta el inconveniente principal del sostenimiento en el tiempo. Las relaciones tienden a ser cada vez más cortas, como consecuencia de la búsqueda constante de bienestar (sin trabajar para ello) y del aumento desmedido de la oferta de vínculos, cuando antes el conocer personas nuevas se reducía a conocidos de ámbitos de grupos de amigos, ambiente laboral y/o las salidas a lugares públicos, hoy la inserción de las redes sociales como fenómeno ha ampliado la oferta de posibilidades a la vez que fogonea con el cambio repentino y la necesidad de satisfacción inmediata un amor “fast food”.
Sin embargo todo esto siempre tiene gusto a poco en parte porque se comete el frecuente error de considerar a la pasión e intensidad inicial de conocer alguien como amor, lo que al no sostenerse en el tiempo es descartad. El amor real como tal se encuentra más cercano a la tranquilidad, reducción de conflictos y a lo rutinario de lo que la gente cree. Así la pasión y la intensidad son solo un impulso efímero que carece de sostenibilidad en el tiempo generando, si es confundido con amor, falsas expectativas y más frustración que satisfacciones. El amor entonces es más bien tranquilidad y reducción al máximo de conflictos.
¿Cómo son percibidas las relaciones amorosas, el amor familiar y las éticas del cuidado en las épocas actuales?
En sintonía con lo mencionado anteriormente las relaciones amorosas en la actualidad son generalmente sub valoradas, bajo la falsa percepción de que se puede prescindir de todo, incluyendo los vínculos o la necesidad de cariño, así muchas relaciones amorosas o familiares están sufriendo un deterioro y han aumentado las autopercepciones de soledad, escuchándose con más frecuencia frases como me “siento solo/a” y todas la patologías asociadas a ese fenómeno como a dependencia emocional, las enfermedades psicosomáticas, ataques de ansiedad, depresión o las adicciones al trabajo como única fuente de obtención de atención y compañía.
A la par aumentan las pseudo-terapias (regresiones, constelaciones familiares, couching) que ofrecen bienestar inmediato con mínimo esfuerzo, haciendo una analogía; intentan aliviar el asma con una aspirina. El correcto autocuidado requiere de mucho y principalmente constante trabajo mental y esfuerzo personal en el sostenimiento de conductas, generación de nuevos hábitos y aumento de conocimiento propio e identificación de factores generadores de ansiedad, algo a lo que no muchos están dispuestos a realizar ya que lleva tiempo y los resultados justamente no son inmediatos.
¿Qué nos puede decir del poliamor?
La palabra poliamor surge como una justificación de la infidelidad ante la imposibilidad de uno de sus miembros de terminar una relación cuando fue engañado. En la práctica siempre que se plantea una relación de poliamor tenemos una persona que ama y otra que saca provecho de esta última. Un porcentaje menor de parejas puede sostener el poliamor, en la práctica, en casi el 100 por 100 de los casos uno (el/la más débil, el que solo aguanta) sale lastimado a mediano o largo plazo ya que accede a establecer este tipo de vinculo con la oculta intención de que esta condición cambie en el futuro y se alcance la exclusividad vincular. Es casi imposible pensar en el amor de pareja sin la exclusividad sexual o por lo menos sin la apariencia de esta, así el poliamor es más un modismo mediático que una realidad vincular, es un modo de soportar de personas que por lo general padecen de patologías como la dependencia emocional o son víctimas de la manipulación de otros con rasgos psicopáticos.
¿Qué nos puede decir sobre la monogamia?
La monogamia aunque anticuada en su pronunciación y desprestigiada en la actualidad sigue siendo la forma más satisfactoria de vínculo amoroso entre dos personas. Diversos autores plantean que un vínculo amoroso saludable es aquel que cumple al menos con los siguientes tres puntos: que la pareja tenga proyectos en común (a mediano o largo plazo), que sea socialmente conocida por todos (amigos, familia etc.) como tal y tener un vinculo exclusivo y distinto a todos los demás. Esta definición por supuesto incluye y amplía la de la monogamia.