El «ala política» de Cambiemos pide a Elisa Carrió como candidata en la provincia de Buenos Aires para enfrentar a Cristina. Crece la pulseada interna.
El discurso de Mauricio Macri ante el Congreso agitó las discusiones internas en el oficialismo de cara a las elecciones de octubre. Ratificada la estrategia de polarización con el kirchnerismo, el ala política de Cambiemos pugna para que Elisa Carrió encabece la lista de la coalición en la provincia de Buenos Aires.
Los dirigentes de este sector, encarnado por la Coalición Cívica, una parte del radicalismo y la denominada pata política de Pro, sostienen que la diputada es la candidata más potente para enfrentar una eventual postulación de Cristina Kirchner. «No hay margen para alquimias», aduce un dirigente de Pro de diálogo fluido con el Presidente, y muestra una encuesta reciente: en primer lugar figura la ex presidenta, con 35 puntos, seguida de cerca por la líder de la Coalición Cívica, con 32. Tercero figura Sergio Massa, del Frente Renovador.
El desempeño electoral de Cambiemos en el principal distrito del país será definitorio para el futuro del gobierno de Macri, reconocen en la Casa Rosada. «Si ganamos las elecciones de octubre, tendremos seis años más de gobierno», sentenció el mismo dirigente, enfrentado con la idea de que sea María Eugenia Vidal la que defina al candidato en territorio bonaerense. Claro que, advierte, cualquier proyecto futuro se desmoronaría si Cambiemos cayera derrotado en Buenos Aires.
¿Carrió estaría dispuesta a jugar en Buenos Aires? En su entorno aseguran que sí, si es que su candidatura sirve para ganar las elecciones en la provincia. Pese a los problemas de salud que padeció en los últimos meses, ella nunca resignó su intención de dar la pelea electoral. El problema, según Carrió, no es si ella compite o no en la provincia de Buenos Aires, sino qué tipo de candidato pretende la gobernadora en su distrito. Y aquí aparece el nudo del conflicto con nombre y apellido: Jorge Macri.
Carrió no oculta su antipatía por el intendente de Vicente López. El primo del Presidente aspira a quedarse con la candidatura a senador por Buenos Aires y ansía contar con la bendición final de Vidal. La líder de la Coalición Cívica ya dijo que jamás compartiría con él una lista electoral. «Tiene problemas de corrupción», argumentó.
En las últimas horas, Carrió agitó el avispero. «Quería ayudarla mucho más [a Vidal], pero respeto su decisión de haber elegido a Jorge Macri como candidato a senador. Yo, por cuestiones éticas irreconciliables, jamás compartiría una lista con él», asestó anteanoche, durante el programa A dos voces. ¿Qué busca la diputada? Poner en crisis una decisión que en Vicente López dan por tomada. «Jorge está muy bien con Mauricio, Vidal y Marcos Peña», cuentan cerca del primo de Macri. Detallaron que hoy tiene una reunión pautada en la residencia de Olivos.
En rigor, todavía no hay nada definido en términos de candidaturas. Pero lo cierto es que Carrió no oculta cierto pesar por algunas actitudes de la gobernadora. Por caso, reprochó que el gobierno provincial no le proveyera de más datos para avanzar en sus denuncias contra Daniel Scioli, gobernador durante el kirchnerismo. «Yo fui la única que denunció a Scioli en la provincia», disparó.
En su entorno insisten: Carrió no se desespera por la candidatura, pero no aceptará ninguna otra que, a su juicio, atente contra el «modelo de cambio» que implica Cambiemos. «Queremos ver si efectivamente hay intención de consolidar lo logrado o si, en realidad, se trata de disfrazar lo viejo con un ropaje falso de nuevo», indican cerca de la diputada.
La estrategia de apostar a una candidatura de Carrió para polarizar con Cristina Kirchner choca con la estrategia delineada por la Casa Rosada, donde el ala política tiene escasa influencia desde que Emilio Monzó fue corrido del armado electoral. El sector hegemónico del Gobierno entiende que la figura central de la campaña en la provincia debe ser Vidal, por lo que no sería necesaria una postulación de la jefa de la Coalición Cívica. «¿Quién mejor que María Eugenia para polarizar con el kirchnerismo? Ella le ganó a Aníbal Fernández», argumentan cerca de la gobernadora.
De acuerdo con esa mirada, promovida por Jaime Durán Barba, no es determinante el nombre del candidato. En esa hipótesis, ganan terreno dirigentes como Gladys González e intendentes jóvenes como Diego Valenzuela (Tres de Febrero). También Jorge Macri.
Pero el ala política discute ese análisis. «No nos podemos arriesgar. Aunque Vidal esté en el centro de la campaña, tenemos que ir con los mejores candidatos», dijo un diputado radical que mira con atención las definiciones en la provincia. En la misma línea, el ala política cree que debe permitírsele a Martín Lousteau dar la batalla interna en el oficialismo de la ciudad.
Un dirigente de Pro suma argumentos para que el elegido no sea Jorge Macri: «Tenés que estar muy seguro de que vas a ganar para poner en juego el apellido del Presidente». Otro elemento que jugaría en contra de esa estrategia es el poder de daño de Carrió. ¿Qué actitud tomará la diputada si finalmente se decide que el candidato de Cambiemos en la provincia sea el primo del Presidente?
En La Plata insisten, de todos modos, en que Vidal no se definirá públicamente por ningún candidato hasta que llegue el momento de armar las listas. «Ella no está pensando en eso. Tenemos que resolver la paritaria docente. Ya llegará el tiempo de hablar de candidaturas», dicen en el entorno de la gobernadora. Más allá de sus intenciones, la disputa interna por la candidatura de Cambiemos ya empezó.
Fuente: La Nación