No tienen un mango. Entre la inoperancia propia, la inflación y que el gobierno provincial también les ha cerrado el grifo no saben qué corno hacer.

La situación beneficia, políticamente hablando (al menos de manera momentánea), al ejecutivo provincial, que de esta manera puede tener agarrados de las… a todos los intendentes: o muestran fidelidad o la platita no llega.

Pero la tensión es grande: muchos de los municipios no tienen ni pa’ pagar los sueldos. En Campo Quijano, Cerrillos y Las Lajitas y Moldes la cosa está que pela.

Muchos de los afiliados a ATE salieron a cortar las rutas, reclamando una urgente renegociación paritaria, ya que el monto ofrecido en noviembre del año pasado del 25%, terminó por licuarse entre con los incrementos inflacionarios de los últimos meses.

 Este aumento se está pagando en tres partes. En marzo ya cobraron la primera actualización de sueldos del 11%, pero se analiza que las otras subas apenas podrán contener la escalda de precios en la canasta de este año.

 En campo Quijano está tomada la sede municipal. En Cerrillos hay reuniones con el jefe comunal. En Moldes también siguen los reclamos y protestas.

Hasta ahora La Viña es el único municipio que acordó con los asalariados un aumento de 1.500 pesos no remunerativos y progresivos; los dos primeros meses cobrarán $750 y el tercer mes, estarán percibiendo el aumento completo.

 Y en Las Lajitas hasta los concejales protestan. Y manifestantes habían tomado la sede de la Oficina de Empleo de Anta.

 El que puso la jeta, pero sólo a medias, como pa’ largar algo en tono apocalíptico, fue el presidente del foro de intendentes de Salta, Sergio “Topo” Ramos: “en invierno la van a pasar bastante mal los municipios porque están dando cosas que no tienen”, dijo.

 Además otro problema: el aumento de los polis. En este sentido adelantó que el pago de la alícuota del aumento a los policías se va a repartir entre todas las comunas, por lo cual habrá menos dinero disponible”.

 Si zafan ahora, cuando tengan que pagar los aguinaldos van a estar en un gran problema.