Durante el mes pasado envenenaron a 20 gatos en cercanías del Hospital del Milagro. Aseguran haber pedido con anterioridad el servicio de castración a la municipalidad. No les dieron bola.
Era la misma gente que labura en el hospital quienes se encargaban de alimentar y cuidar a los gatos abandonados que andaban por la zona. Luego de un tiempo sucedió la tragedia.
Cadáveres de felinos regados en cercanías del nosocomio fueron encontrados en varias ocasiones durante el mes pasado. Gatos jóvenes, viejos, gatas preñadas, todos envenenados. “9 de agosto: fueron envenenados Griselda, Chocolina (preñada) Solcito (preñada), Lionel. El mismo día desaparecen Karina y Plomo. 22 de Agosto: bella de seis meses, fue encontrada retorciéndose de dolor, sin poder respirar, no tenía estabilidad”, dice una especie de registro de algunas de las muertes, publicado en la página de APAN Salta.
“Tenemos fotos y el informe de una de las médicas veterinarias que afirmaron que encontraron veneno en el estómago”, dijo una de las personas que trató de socorrer a los felinos sin mucha suerte.
María Elena y Mirta, trabajadoras del hospital, relataron que a pesar de haber realizado el pedido de castración a la Dirección de Zoonosis de la Municipalidad. «Desde la Dirección nos informaron que no les habían llegado los insumos para realizar las castraciones», aseguraron.
David Ferri, director de esta oficina, para zafar tuvo que intentar una excusa que no convence demasiado: “El quirófano móvil ya lo conseguí, pero no me llegan los insumos para hacer las intervenciones”.
