El diputado nacional Bernardo Biella recorrió la narco frontera y descubrió cosas que todo el mundo ya sabe: pocos efectivos para controlar la zona, falta de recursos o que la radarización es deficiente. Nada dijo sobre lo que hará para resolver ese problema ya estructural.
Sorprendido, Biella declaró mediante un parte lo siguiente: «Nos reunimos con el Comandante de Gendarmería Nacional Destacamento Orán y pudimos rescatar que si bien aumentó el número de tropa, en un poco más de 500 efectivos, éstos se desempeñan en una superficie de más de 50.000 km2; por ende no es suficiente para cubrir toda esta vasta región. Asimismo, se detectó que faltan recursos materiales, móviles y tecnológicos necesarios para combatir el narcotráfico, como cuatriciclos, motos tipo enduro y las tan anunciadas Hummers, que actualmente se encuentran mal distribuídas por el Territorio Nacional”.
A la hora de evaluar el sistema de radarización perteneciente al Plan Fortín II formado por unos 20 radares tipo INVAP que van desde Jujuy hasta Misiones, definió a os aparatos como precarios aparatos portátiles que tienen como fuente de energía “a 2 baterías de corriente continua, con una autonomía estimada de 5 a 6 horas, momento en el que se la recambia por otro juego, completando así un tiempo estimado de protección aérea de 10 a 12 horas/día”. El diputado nacional, además agregó que los radares tienen un alcance de hasta dos mil metros de altura y unos 30 kms de radio, que tan sólo detectan objetos voladores en movimiento, su rumbo y distancia al radar; no pudiendo identificar el tipo de aeronave, su altura de vuelo y otros datos de relevancia; recalcando que en dos años se detectaron más de 700 «vuelos irregulares».
Finalmente Biella sostuvo que para colaborar con el recurso humano presente en la Narcofrontera se necesita conseguir un verdadero «candado tecnológico», esto se lograría con soporte adecuado, como es instalar scanners móviles de envergadura para facilitar la detección de drogas, divisas, contrabando en general, en automóviles, buses y vehículos pesados como son los colectivos y camiones de gran porte, con ellos no sólo se lograría un control más eficaz, sino mas eficiente ya que en minutos se analiza un micro de dos pisos y cuatro ejes, facilitando el control y la requisa especialmente en los llamados «toures de compras fronterizos»; los que circulan entre 50 y 70 unidades de transporte de pasajeros, casi imposibles de inspeccionar en tiempo y forma sin este tipo de herramienta, a la que el Diputado no considera un gasto, sino una verdadera inversión.