El expediente de la petrolera china High Luck, rechazado de plano por la gestión Urtubey, volvió a tomar nuevos bríos con el cambio de gestión. Y en tal contexto, la híper polémica compañía volvió a los despachos oficiales de la mano de la inefable ex ministra de Producción, Paula Bibini. (Por: Federico Pérez).
En efecto, el martes 21 la ex funcionaria U reconvertida en lobbysta de la compañía hidrocarburífera (¿Las leyes permitirán la promiscuidad entre la función pública y la órbita privada?), se reunió con los ministros de Gobierno, Ricardo Villada, y su par de Producción, Martín De los Ríos. A este cónclave, la homónima de la ex ministra Bibini acudió acompañada por el ejecutivo John Tang, quien pese a su apellido llegó en noviembre de 2017 a estos mismos despachos oficiales para una ceremonia con té rojo (presentado tradicional y originario de China, aunque venía de la provincia vietnamita Lai Chau).
Esta reaparición de Bibini, High Luck y Tang ocurrió, luego de un escandalete sucedido en el tramo final de la gestión Urtubey, debido al cerrado rechazo de funcionarios a un recurso jerárquico presentado por la compañía y se amparó en una ristra extensa de incumplimientos contractuales con el Estado provincial. Por aquel no tan lejano mes de noviembre de 2019, Baltasar Saravia (Jefatura de Gabinete) y Graciela Pinal de Cid (Producción) desestimaron la pretensión corporativa, con argumentación letal. El primero se escudó en su condición de abogado, la segunda en los recaudos aconsejados por el asesor letrado del Ministerio; ambos, devotos de circular libremente por la vida.
La angurria entre la miseria.
Como se recordará, High Luck Group increíblemente mantiene ámbito de actuación en los emiratos gauchos Chirete (departamento Rivadavia), Morillo y Tartagal Oriental (departamento San Martín), dicho esto en función del rosario de incumplimientos que arrastra. Es decir, la petrolera china discute cómo continuar facturando $ 230 millones anuales libres de toda carga, en la misma región que produce -también a chorros- hambre y muertes por desnutrición.
Las desventuras de la provincia con esta compañía asiática comenzaron cuando el Estado provincial encaró en 2018, un año después de la ceremonia del té rojo, el procedimiento para la licitación pública nacional e internacional de doce áreas de exploración. Dos años atrás, se presentó ante los legisladores este plan de acción que permitiría concretar inversiones que oscilaban, al estilo Alferista, entre 15 y 20 millones. En este caso, de dólares, como aclaró en Mitre 550 Paula Bibini, homónima de la actual lobbysta petrolera.
En la ponencia realizada esta semana, Tang se refirió a cómo sacarle el jugo a una superficie más extensa del bloque situado en Chirete, cerca de la localidad Los Blancos. Sin embargo, esta anexión de superficies cada vez más extensas para perforación terminó cercando a la familia de Jorge Robledo, vecino rivadaviano que en mayo del año anterior expuso sus airados reclamos en una nota con El Tribuno. Él vivía en un monte, muy contento, hasta que un buen día se madrugó con la mala que aterrizaron okupas con maquinaria pesada, bridas y tubos metálicos.
Todo se pierde.
Tal vez, los embajadores de High Luck hayan confiado en la desmemoria del Estado, pues el tramo final de la administración previa se cerró con negativa y escándalo. Con la concesión a punto de caer, Bibini y Tang sondearon a la gestión Sáenz, a partir de proyecciones que incluyeron planes de inversión en el departamento Rivadavia.
“Creemos que Salta tiene mucho potencial”, resumió este martes con entusiasmo el cultor de la ceremonia de 15 minutos con la infusión colorada, a la que relata como un ritual inesquivable en su China natal, mientras sirve hebras provenientes de Vietnam. Algo que al parecer fue de la preferencia de los funcionarios saenzistas, en contraste con aquel pulgar e índice en torno a su garganta que en noviembre de 2017 produjo la misma degustación a la Bibini funcionaria.
El hecho es que Vilada, el titular de la cartera de Gobierno, ratificó el compromiso de la actual gestión con el desarrollo productivo entendido como “un compromiso que adquirimos con el pueblo salteño”. Mientras De los Ríos, su par de Producción se refugió en la necesidad de “generar mejoras y puestos de empleo para la gente”.
Paseo por España.
Tras una serie de visitas por calle España, en la primera cuadra, el Secretario de Minería y Energía, Ricardo Alonso, puso al final de la semana proa al norte provincial. En esta región, el funcionario desembarcó en Tartagal y desde allí se encargó de hacer un paneo de todos los proyectos hidrocarburíferos en marcha. La meta fue “conocer fehacientemente la situación actual del sector y sus proyecciones”, dijo el parte oficial difundido por el Ejecutivo provincial.
Junto al director de Hidrocarburos, Pablo Guantay, y al intendente anfitrión, Mario Mimessi, Alonso analizó la posibilidad de conformar una Unión Transitoria de Empresas en este departamento norteño, con el fin de generar fuentes de trabajo. Desde arriba en el mapa provincial, el Secretario de Minería y Energía mandó un guiño, al indicar que junto al ministro De los Ríos estamos trabajando” en conjunción con las petroleras que habitan en la región norte.
De todas maneras, Alonso avisó que habrá que aguardar lineamientos en materia energética que adopte la gestión Fernández. O sea, seguir malgastando subsidios a la energía eólica, por ejemplo, o incentivar la generación por vías menos onerosas. “Esto será determinante para saber qué incentivos tendrá Salta y en especial el norte”, adelantó el titular de Energía y Minería provincial.
El recorrido administrativo.
El rastreo del expediente High Luck Group en los canales administrativos es una suerte de hit para los entendidos en cuestiones estatales. La Secretaría de Energía y Minería le achacó a la petrolera china incumplimientos en las concesiones para explotación petrolífera, a lo largo de todo el año 2019.
Así transcurrió esta cuestión en gran parte del año pasado, hasta que Bibini y Tang saltearon a esta dependencia y en el tramo final del año alegaron tener presentado un recurso jerárquico ante la ministra de Producción, Graciela Pinal de Cid. Hacia noviembre último, ni esta cartera o bien Jefatura de Gabinete tenían novedad alguna en cuanto a aquella reconsideración solicitada por High Luck Group, tratando de evitar que se le diera de baja a tales convenios.
Como ya se describió en un párrafo anterior, tanto Pinal de Cid como Baltasar Saravia expresaron su negativa terminante a emparchar o suspender medidas que abominen el acuerdo con HLG. “Ninguno quiso ir en cana”, rememoró este fin de semana una fuente cercana a sendos despachos, durante la gestión Urtubey.