Jesús puede haber multiplicado panes y peces, pero Juan Manuel Urtubey tiene el extraño don de triplicar los ñoquis. Por decreto, una nueva dependencia: “la Unidad Provincial de Gestión de Recursos Humanos, Informática y Calidad” y un salvavidas para Panchi Palópoli.
El Boletín oficial de hoy nos revela que por decreto se le extendió el contrato a Francisco Palópoli para organizar “eventos deportivos”, algo que debería hacer la secretaría pertinente, que él comandó con más penas que gloria.
El decreto Nº 565/14 también indica que en realidad César Francisco Palopoli ya venía prestando este “servicio”, según el contrato firmado entre él y la Secretaría General de la Gobernación. “Que por el mismo el contratado se compromete a realizar la planificación y organización de eventos deportivos en la Provincia de Salta, siendo necesario continuar con los servicios contratados; Que se realizaron las autorizaciones e imputaciones correspondientes, contándose con presupuesto en la partida pertinente para el ejercicio 2014”, se puede leer entre los considerandos.
Lo que no se entiende es para qué cornos se tiene, entonces, una Secretaría de Deportes (dependiente del Ministerio de Derechos Humanos) y también por qué Federico Posadas ha sido contratado como “organizador de eventos”, entre los que se puede nombrar, por ejemplo, el Dakar.
Parece evidente que hay una superposición de carguitos (léase curros) que además de ser sumamente costosos (el sueldo de los funcionarios, el alquiler de los lugares donde estas personas deben abrir una oficina donde poder rascarse con comodidad) generan una superposición de responsabilidades que termina entorpeciendo el funcionamiento del gobierno.
Por eso tuvieron que crear tantos cargos de “coordinadores” entre ministerios.
Y hablando de eso: hoy, también por decreto, se conoció que se ha creado un nuevo cargo: la de “COORDINADOR DE GESTION DE RECURSOS HUMANOS” y al mando de esta nueva área con nombre súper pomposo estará… (¿algún Mamaní?, ni lo sueñen) AGUSTINA MARIA SARAVIA DIAZ TOSO.
Cargo pomposo, apellidos aún más pomposos.