El Foro de Mujeres criticó el convenio firmado entre el Ministerio de Derechos Humanos y el obispo de la ciudad de Orán, Gustavo Zanchetta, para que la Iglesia se haga cargo del refugio para víctimas de violencia de género. «Nos oponemos a la vuelta de lo religioso sobre nuestros cuerpos», dijeron.

En Noviembre pasado se firmó el convenio, cuando funcionarios del Ministerio de Derechos Humanos se reunieron con el obispo de la ciudad de Orán, Gustavo Zanchetta, para que la Iglesia colabore con la dirección de dicho albergue en esa localidad.
En esa “mesa de trabajo”, además del religioso, también estuvieron la ministra Marianela Cansino, el secretario de Derechos Humanos, Martín García Cainzo; el secretario de Asistencia Crítica, Chrsitian Saade; el coordinador general, Fernando Martinis, y el diputado Baltazar Lara Gross, con el fin de analizar las estrategias de acción vinculadas a la trata de personas y a la violencia en el municipio y alrededores.
Irene Cari, presidenta del Foro mencionó al respecto “Nos oponemos a la vuelta de lo religioso sobre nuestros cuerpos, como se les cruza por la mente que, en un contexto político de auge de los derechos humanos y de género entreguen la vida y la salud de las mujeres a manos de una Iglesia cuestionada y cómplice de la mortalidad materna y trata de mujeres. No hay un lugar para pensar, reflexionar, construir y decidir políticas públicas de justicia social”.
Cari cuestionó la medida agregando “Merece todo nuestro repudio al considerarnos tuteladas por un credo. No somos objetos de nadie ni menos de la heteronormatividad y del patriarcado traficante de nuestros cuerpos, pues parece que aún no somos sujetas ciudadanas con las capacidades y potencialidades de ser activas protagonistas del desarrollo de nuestras vidas”, criticó la dirigente.