Vuelve a circular en la prensa nacional información que ubica a Salta como una de las provincias con mayor cantidad de tierras rurales extranajerizada. En departamentos de los valles de Lerma y Calchaquíes los porcentajes superan el 30%. (G.T.)
Por alguna extraña razón, el diario Página/12 dedicó el domingo último (día de las elecciones presidenciales) un considerable espacio a una nota sobre el proceso de extranjerización de tierras rurales en el país. El texto firmado por el periodista Raúl Dellatorre detalla datos del Registro Nacional de Tierras Rurales y acusa que en Salta “son 9 los departamentos con participación extranjera superior al 30%, el doble del límite que marca la ley”. Esos departamentos, según se informa, son Molinos, San Carlos, Cafayate, Guachipas, La Viña (en el texto se nombran como Guchipar y Las Viñas), Chicoana, Cerrillos, General Güemes y Orán.
La información es correcta pero no es nueva. El propio Página/12 y también Cuarto Poder advirtieron hace ya un par de años que Salta es una de las provincias con mayor cantidad de tierras rurales en manos del capital transnacional.
En un artículo titulado “Tierras de nadie, tierras de otros” y publicado el 3 septiembre de 2012, este semanario dio cuenta de los datos provisorios (filtrados a Página/12 desde el Ministerio de Justicia de la Nación) y advirtió que “casi 335 mil hectáreas rurales están en manos extranjeras en Salta” y que por eso la provincia se ubica “segunda, después de La Rioja, entre las provincias más extranjerizadas del país”. Casi un año después, en otro texto titulado “La Salta gringa” y publicado el 28 julio de 2013 repitió que “Salta es una de las provincias con más tierras en manos extranjeras, según el relevamiento del Registro Nacional de Tierras Rurales presentado por la presidenta Kirchner” y detalló que “de casi 16,5 millones de hectáreas rurales salteñas, más de 1,8 millones están en manos extranjeras”.
En ambos artículos se informó que de las casi 16,5 millones de hectáreas rurales que tiene la provincia algo más de 1,8 millones y casi el 11% ya están en poder del capital extranjero cuando en el resto del país ese porcentaje no llega al 6%. Con los datos “provisorios” primero y con los “oficiales” presentados por Cristina Fernández de Kirchner después, Cuarto Poder y también Página/12 y otros medios de difusión revelaron que millones y millones de hectáreas argentinas están en manos de empresas extranjeras.
El aporte del nuevo texto del matutino porteño es prácticamente nulo. “Un detalle más minucioso de ese estudio, recientemente publicado por el Registro Nacional de Tierras Rurales, deja ver otro aspecto de la irrupción del capital extranjero, a través del control de proporciones mayores al 15% de la superficie (en algunos casos, en el rango del 30 al 60%), en al menos 49 subzonas (o departamentos provinciales) en todo el país. Las provincias de Corrientes, Misiones y Salta son las que presentan mayor número de departamentos con fuerte presencia extranjera en la tenencia de tierras”, escribe Dellatorre y no se equivoca. Pero esta información fue presentada el 23 de julio de 2013 por la mismísima presidenta Cristina Fernández de Kirchner y por cadena nacional. “En algunas de las 569 subdivisiones departamentales, algunas que ya tienen el 15%. Allí, por supuesto, no se podrá vender más tierra a extranjeros, pero tengamos en cuenta que de esas 569 subdivisiones departamentales solamente 49 están excedidas” dijo, textual, la jefa de Estado esa tarde y remarcó que ninguna de las 23 provincias argentinas supera el límite.
Imposible saber por qué un matutino dedica una página entera a una información vieja justo en un día en el que el espacio escasea como en un domingo de elecciones. Eso poco importa y, además, invita a buscar más y mejor información.
Cuarto Poder lo hizo pero no tuvo mayor suerte: en el Ministerio de Justicia de la Nación, organismo del que depende el Registro Nacional de Tierras Rurales, no pudieron aportar nuevos datos y en la Dirección General de Inmuebles de Salta tampoco pudieron hacerlo porque su titular Juan Esteban García Bes estuvo ausente de su oficina los días jueves y viernes. De manera tácita, en uno y otro caso, confirman lo que (también) ya escribimos: Salta es una de las provincias que aún no cumplió con los requerimientos de la Ley de Tierras. Eso se publicó el 13 de abril de este año y bajo el título “Una mala que puede ser buena” se contó que “la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales denunció que Salta, junto a Santa Cruz, San Juan, Córdoba, Santiago del Estero, Corrientes, Catamarca y Jujuy están en falta y reclamó a las autoridades nacionales que hagan cumplir la ley”.
El detalle presentado por el periodista Dellatorre es, en cualquier caso, inquietante y plantea interesantes interrogantes. Los departamentos salteños “extranjerizados” abarcan “prácticamente de norte a sur toda la franja central de la provincia” y no son los que, en principio, un distraído observador hubiera señalado como interesantes para el gran capital agropecuario. No son ni Las Lajitas ni Joaquín V. González (en el este), ni Metán o Rosario de la Frontera (en el sur), ni Rivadavia (en el norte) los destinos elegidos por extranjeros para invertir en Salta. ¿Qué buscaron y que buscan esos inversores foráneos en Molinos y La Viña o en Cafayate? Esa es la pregunta que, cuando Inmuebles cumpla con lo que le manda la ley, sabrán los salteños porque Cuarto Poder y también Página/12 lo informarán.
