En una reunión realizada en el hotel del dique que pertenece al poderoso empresario mediático, Urtubey instó a sus bronceados funcionarios que pongan mucho amor en la tarea. Aunque Urtu citó a la Madre Teresa de Calcuta, la ostentación se parece mucho al de María Antonieta en la Francia pre revolucionaria.

La web del gobierno publica que la reunión de trabajo que encabezó Urtubey fue en Coronel Moldes. Se olvidó de precisar que el lugar era el hotel del empresario Mario Ernesto Peña del que no se sabe si prestó las instalaciones por amor o por dinero. De todos modos, en esa jornada se reunieron funcionarios provinciales de todos los niveles para trazar los lineamientos de gestión, “reunión en que destacó las mejoras alcanzadas en las distintas áreas y ratificó el compromiso con los sectores más vulnerables de la provincia”, reza la versión oficial.

“Construyamos un cambio profundo, pero profundo en serio en nuestra sociedad”, dijo Urtubey quien pidió a los funcionarios aplicar las enseñanzas de la madre Teresa de Calcuta: “Nos enseña permanentemente que debemos apelar a la revolución del amor en acción, que es hacer hasta las cosas ordinarias con un amor extraordinario”. “No me canso de decir que tenemos que dar hasta que duela, porque no hay expresión más sublime de amor y eso quiero de cada uno de ustedes, eso es lo que el pueblo de Salta espera de nosotros”, aseguró el mandatario. Por el lugar en el que se realizó el encuentro, la enorme factura que eso represento y el contexto en el que vive la provincia, el encuentro parecía más propio de la Francia pre revolucionaria de María Antonieta que para algunos era el símbolo de la frialdad y la ignorancia a la que lleva el poder y la ostentación.