La comunicación tuvo grandes cambios a partir de la llegada de internet. La creación de contenido y los actores de la comunicación se diversificaron. La convergencia cambio la manera de acceder al derecho a la comunicación por lo que los ciudadanos debieron realizar un cambió en sus prácticas.

(Guadalupe Macedo)

 

El acceso a la comunicación ahora está atravesado por el uso de internet. En la provincia de Salta el acceso a internet está condicionado. Por un lado, es una de las provincias más pobres y precarizadas del país con el 41,8% de los habitantes bajo la línea de pobreza y con niveles de indigencia del 7,7% (INDEC, 2019). Respecto a las accesibilidades tecnológicas, según la Cámara Argentina de Internet el 44,5% de hogares en Salta tiene acceso a la red, lo que representa un porcentaje por debajo de la media país que es de 65,8% según el Ente Nacional de Comunicación. Lo mismo sucede si observamos en la velocidad de las conexiones fijas, en la provincia de Salta el promedio es de 9.2 MB, una de las más bajas del país. 

Las desigualdades de acceso a las nuevas tecnologías, principalmente de internet dificulta el acceso al derecho a la comunicación por lo que surgió la necesidad de considerar a internet como servicio esencial para la educación y el trabajo. Un paso hacia ese horizonte es el decreto 690/20 que establece que: “los Servicios de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y el acceso a las redes de telecomunicaciones para y entre licenciatarios y licenciatarias de servicios TIC son servicios públicos esenciales y estratégicos en competencia».

Claudio Ambrosini, el titular de ENACOM recalcó que “para el Estado argentino es una gran responsabilidad llevar conectividad a todos, comenzando con los que menos tienen. Por ello consideró que, con el acceso a esta herramienta, se crea ciudadanos de primera y a que la conectividad es un derecho”. El poder acceder a los nuevos medios de comunicación ya sea como productores o como receptores es un gran desafío para aquellos puntos del país en donde la conectividad no es óptima. Internet es un servicio que no pertenece al estado y son de multimedios que monopolizan el servicio por lo que no hay una inversión para mejorar los servicios ni preciso accesibles para que puedan acceder todos los ciudadanos principalmente en la provincia de Salta. 

Existe así un gran desafío para poder hablar de un nuevo ecosistema de medios digitales, que cuenta con pequeñas particularidades y tiene un gran porcentaje de audiencia que no consume medios tradicionales como la radio y la televisión. Esto surge ya que, en la actualidad, los usos de las pantallas en la provincia como en el país, se han modificado, ya que las practicas sociales y los modos en que se usan las nuevas tecnologías de la comunicación y las pantallas se ven modificadas por sus necesidades sociales y culturales. Pero las nuevas prácticas de las pantallas tienen un vínculo con la industria cultural tradicional. Las nuevas prácticas culturales y sociales que realizan influyen con las prácticas y uso que le dan a las mismas. 

“En el ecosistema digital aparecen muchos desafíos económicos, regulatorios y del funcionamiento de la democracia. Entre ellos está la crisis del modelo económico de los medios tradicionales. Hoy se corre el eje desde un debate enfocado en la libertad de expresión hacia otro referido a la problemática económica, donde los actores tradicionales reclaman acciones para «nivelar la cancha». En verdad, la disputa siempre fue económica, pero estaba solapada con argumentos vinculados a la libertad de expresión. Este tipo de demandas ya no aparecen encubiertas, sino que hay un planteo abierto sobre cómo hacer para que las plataformas financien a los medios de prensa” afirma Ana Bizberge, investigadora del Conicet y de la Universidad Nacional de Quilmes.

La concentración mediática afecta a la libertad de expresión y a la pluralidad de voces. Hoy las audiencias no son meras receptoras, sino que se convirtieron en productoras desde la masificación de las redes sociales. Los medios de comunicación tradicionales “han perdido relevancia económica. El financiamiento tiende a decrecer en todos estos ámbitos, pero en la prensa cae de manera extrema. La televisión ha perdido menos, porque todavía compite en un pie de igualdad con las redes. En el caso de las radios, son muy pocas las que se mantienen por publicidad, la mayoría se financia con la venta de espacios. Pero el gran problema de los medios de comunicación es la pérdida de ese modelo de generación de ingresos. Y la prensa, en este punto, casi desapareció como lugar de consumo de noticias. Esa torta cada vez más se va para las redes sociales, que captan las audiencias masivas incluso para ver noticias” afirma Guillermo Mastrini investigador.

En argentina no existe una legislación sobre los medio y plataformas digitales ya que la Ley 26522 solo regula los medios tradicionales. Por este motivo desde la Defensoría del Público realiza audiencias para conocer la realidad de los medios a lo largo del País. El próximo 1 de septiembre se efectuará la audiencia del NOA de manera hibrida. Será en Tucumán y se replicará por internet para que puedan participar la mayor cantidad de personas del NOA. Tiene la intención de escuchar las diferentes voces de la comunicación para poder buscar elaborar una legislación de los medios audiovisuales y la convergencia en el país.