El ministro de Gobierno, Juan Pablo Rodríguez, cree que el objetivo de Juan Carlos Romero es no competir el 17 de mayo para evitar una derrota humillante. Para ello apela a denuncias falsas y chicanas que puedan servirle de coartada para una huida como la que protagonizo con Menem en el 2003.
“La sensación es que están preparando el camino para no competir en las elecciones generales del 17 de mayo por las chicanas políticas que usan para entorpecer y ensuciar el proceso. No deben tener la actitud de competir ni de volver a perder”. El análisis del ministro de Gobierno, Juan Pablo Rodríguez, sobre los movimientos de Juan Carlos Romero lo llevan a concluir que el exgobernador se bajará antes para no repetir la experiencia que tuvo con Carlos Menem en 2003.
“El análisis que se puede hacer es que Romero no terminará compitiendo. Ojalá que lo haga, pero la sensación es que transitan ese camino”, agregó Rodríguez. El funcionario recordó las permanentes denuncias de fraude a un “proceso electoral transparente”, denuncias que “sólo son mediáticas, nunca las realizaron ante la Justicia”.
Rodríguez citó la escena que montaron ayer los apoderados del frente de Romero en el Tribunal Electoral, en el inicio de la auditoría del código fuente. “Hicieron circo porque es imposible lo que plantean y lo saben. En la auditoría participan todos los partidos, la UNSa, Poder Ciudadano, menos ellos. La estrategia es evidente: ensuciar el terreno y usarlo para no competir”.
El titular del Ministerio de Gobierno destacó que en los últimos siete años el interior se igualó con la Capital en cuestión de oportunidades. En ese contexto, destacó el aporte de Miguel Isa desde la vicegobernación y de Javier David desde la intendencia de la ciudad.
“Trabajamos pensando en que la gente volverá a respaldarnos el 17 de mayo”, dijo, al recordar la buena elección que hizo David y que fue el candidato más votado en la Capital. “Es más fácil gobernar en equipo y seguramente eso es lo que seguirá pasando durante los próximos cuatro años”.