La suspensión de clases por causa de la creciente propagación del Coronavirus, generó un desafío para la educación en Argentina y en el mundo. Una de las alternativas que se plantea como solución es la virtualidad con un arsenal de plataformas, y herramientas que propuso el gobierno nacional y los mismos docentes olvidando la brecha en el acceso a las nuevas tecnologías que existe en el país. (Por Guadalupe Macedo)

La llegada del Coronavirus al país cambió la manera de impartir educación en los diversos niveles educativos. Desde el día 16 de marzo el gobierno implementó la suspensión del dictado de clases en todos los niveles educativos, dejando a 11 millones de niños, niñas y jóvenes sin clases. El ministro de educación Nicolás Trotta anunció medidas a través del programa “Seguimos aprendiendo” para que los niños y jóvenes no pierdan contenidos educativos. A pesar de estas medidas, especialistas afirman que la aplicación será dispar debido a que no todos tienen acceso a internet o a una computadora y muchos no conocen su funcionamiento.

Por la emergencia sanitaria y la declaración de la pandemia generada por el coronavirua, el Ministerio de Educación de la Nación, Educar S.A. y Contenidos Públicos S.A. mediante la resolución N° 106/2020 crearon el portal seguimoseducando.gob.ar, donde se encuentran materiales didácticos para cada nivel educativo para que puedan ser trabajados con los docentes mediantes multiplataforma. Nicolás Trotta, afirmó: «Tenemos que resguardarnos y quedarnos en nuestros hogares. A través del ENACOM, las compañías de telefonía han garantizado que será sin costo la navegación por la plataforma digital, no consumirá datos”. Incluye recursos de autoaprendizaje, sugerencias para el trabajo del docente y la familia, películas, entrevistas, propuestas didácticas a través de las redes sociales para cada nivel educativo.

Las distancias territoriales como las distancias económicas, micro y macro sociales, repercuten en el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación, según el ENACOM en la provincia de Salta hay menos y casi nula llegada de servicios de internet, tecnologías satelitales y fibra óptica comparados con grandes ciudades del país. La Ciudad de Salta, ubicada en el norte de la Argentina, se encuentra a  1489,7 km de la ciudad de Buenos Aires, distancia que dificulta la llegada de ciertas tecnologías y por lo tanto saberes.

Situación local

Salta es un provincia donde las desigualdades se muestran de manera vertiginosa; en altos índices de muerte infantil por desnutrición, revelan la ausencia de decisiones gubernamentales prolongadas en el tiempo en pos de una posible redistribución de riquezas, la insuficiencia de recursos del estado a la hora de dar respuestas a tales problemáticas, en altos índices de desempleo con una tasa del 13%, en un contexto de lucha comenzando el inicio de ciclo lectivo sin clases con un 80% de acatamiento a la huelga docente.

Todo este contexto social salteño dificulta la educación virtual de los estudiantes. En primer lugar está la brecha tecnológica donde muchos de ellos no podrá acceder en sus hogares a las aulas virtuales y recursos didácticos que se proponen, Muchas de las familias no podrán ayudar a los niños a realizar sus tareas virtuales por carecer de una computadora, o de internet en su hogar o por desconocer el funcionamiento del mismo. Por otro lado son muchos los docentes que no cuenta con la formación necesaria para poder utilizar de manera pedagógica las TIC, muchas veces dada por el desinterés y la brecha generacional en el acceso a las nuevas tecnologías de la información y comunicación.

En la provincia los docentes no son capacitados en utilización de plataformas digitales como moodle, classroom, edmodo y tantas otras plataformas virtuales. Las capacitaciones son dadas en institutos de formación docente privadas con altos costos  o en la virtualidad. La materia TIC que están incluidas en los planes de estudios de la formación docente brindas contenidos desde la informática o telecomunicaciones olvidando, la función social de estas herramientas informáticas, quedando un vacío en la capacidad para ofrecer una propuesta pedagógica desde la virtualidad que sería útil en tiempos como estos. Enseñar a través de la red, implica otras capacidades, otra pedagogía  ya que es muy diferente a la educación presencial. La virtualidad para generar procesos de aprendizaje debe contener espacios de sociabilización, intercambio y debate de saberes entre los estudiantes y docentes, y no solo ofrecer contenidos para que los estudiantes visualicen. Requiere una mayor planificación, ya que la sociabilización y el aprendizaje mediado por las TIC no es un tema menor.

Fabio Tarasow analiza a través de un artículo del Proyecto de educación y nuevas tecnologías de Flacson que “Nadie puede aprender a través de la Red, si alguien no está al mismo tiempo enseñando, y enseñar en red es un proceso que se inicia con la planificación de un proyecto, pensando actividades a través de las cuales se pueda llegar a los objetivos y con el trabajo de moderación y acompañamiento que los docentes realizan de manera permanente a través de los espacios de diálogo e interacción con los participantes. Aprender en línea es muchísimo más que la lectura. No debemos confundir el aprendizaje informal que podemos realizar por interés propio buscando información en Internet con el aprendizaje de contenidos y habilidades específicas que propone la escuela”.