Gestión “Titi”: todo en secreto

 

 

Un informe del Ejecutivo municipal muestra como, para mantener el inmenso aparato mediático de cobertura que le permite ocultar lo que pasa en la ciudad y en la municipalidad, Bettina Romero gastó decenas de millones de pesos entre enero y abril de este año. La intendenta sigue poniendo en práctica un método carente de diálogo y basado en amiguismo que deteriora su política.

 

Cada vez más limitadas parecen ser las políticas que impulsa la municipalidad. Comenzó el año en “modo verano”, con mucha publicidad y poca gestión, y ya estamos en otoño y el cambio prometido parece haber quedado muy lejos. Es cierto que la pandemia ha generado una situación excepcional y que nadie tenía previsto lo que sucedió. Sin embargo, también, es cierto que anteriormente al coronavirus las cosas en la gestión de Bettina no marchaban para nada bien.

La salida de varios funcionarios, los conflictos con la familia municipal, las actitudes de diva, la falta de un gabinete comprometido y las tensiones con los concejales, ya habían colocado al gobierno de “Titi” en problemas mucho antes que el COVID 19 domine la escena. Pero, al parecer, a la hija del ex gobernador no le entran balas y sigue prefiriendo poner en práctica un método que la está llevando al aislamiento total.

No es una novedad señalar que el diálogo prometido apenas fue un latiguillo para entusiasmar a los electores en época de campaña. En su relación con los concejales eso está más que claro. En la semana los ediles discutieron sobre un proyecto impulsado por el Ejecutivo Municipal para modificar los montos de las sanciones por no limpiar baldíos. Bettina había considerado que las sanciones significaban un monto irrisorio y propuso multas entre $63.900 y $129.000. Sin embargo, los concejales redujeron los montos propuestos por la intendencia y quedaron entre $43.290 y $72.150. Más allá de la baja de los montos, el dato político es que por fuera del canillita Moya, quien tiene notables problemas de argumentación, y  la concejal Pontussi y hasta cierto punto Gauffin, fueron sus espadachines en el recinto del cuerpo deliberativo comunal. La intendenta está sola y la distancia con los ediles parece ser enorme.

Información municipal en secreto

La tardanza en la respuesta a los pedidos de informes del ejecutivo municipal capitalino es todo un tema. Recién en la semana ingresó al Concejo Deliberante una contestación a un pedido referido a los ingresos y egresos del municipio en lo que va del año.

Según datos parciales que pudimos acceder, mediante la consulta a usinas de información informal, entre el 1 de enero y el 15 de abril del 2020, de la Municipalidad salieron $1.189 millones para diferentes pagos.

En personal fueron unos $600 millones. Propaganda y Publicidad tuvieron una erogación por más de 21 millones de pesos. En tanto, por Servicios Públicos a terceros $382 millones; en Programas de Acción Social “Titi” mandó a pagar $37,4 millones. Construcciones con Rentas Generales $1.318.000. Al Concejo Deliberante fueron destinados  $84 millones.

Según se pudo conocer no figuran egresos en las partidas Subsidios, Subvenciones y Becas del Concejo Deliberante, en Cultura, Cultura del Concejo Deliberante, Deportes, Servicios Fúnebres Gratuitos, Voluntariado, Programa de Transito y Seguridad Vial, Educación para el Empleo y Programa de Infraestructura. A donde se destinaron esos fondos no se especifica.

En lo que va del  2020 el Concejo Deliberante solicitó informes al Ejecutivo Municipal sobre pautas publicitarias, nómina de las cooperativas encargadas del desmalezado del ejido municipal, venta libre de la goma de mascar Being que contiene imanes, estado de la firma del convenio de prórroga con el gobierno provincial en relación al transporte impropio (taxis y remis) de la ciudad de Salta, nómina de los inmuebles pertenecientes al municipio, sobre el incentivo que percibió en el período 2019 y 2020.

Además,  sobre el banco Macro y la plaza 9 de Julio, sobre las concesiones de la cartelería  en paradores de colectivos, sobre la Panadería Social, acciones concretas que se están desarrollando por la emergencia originada por el brote de dengue, zika y chikungunya, montos de descuentos de tasas e impuesto que como incentivo tienen las personas físicas o jurídicas que integran el sistema.

entre el 1 de enero y el 15 de abril del 2020, de la Municipalidad salieron $1.189 millones para diferentes pagos.

Nada de eso fue respondido, y en lo poco que se avanzó ningún periodista puede tener acceso. Es decir que la Municipalidad de la Ciudad no está cumpliendo con su obligación de brindar información necesaria para la ciudadanía. Solo bastaría con poner una pestaña en la web para que todos tengamos la posibilidad de chequear, sin embargo, pese a las promesas de modernización y trasparencia el secretismo sigue vigente.

La única forma para acceder a las respuestas de los pedidos de informes que realizan los concejales, cuando se los responde, al parecer, es  convenciendo a algún empleado(o algún edil) para que comparta la información, lo cual es una tarea casi imposible puesto que corren el riesgo de sufrir alguna sanción por facilitar datos que son públicos. A esto se sumó que el boletín  oficial de la municipalidad dejó de publicarse durante varios días de la cuarentena.

la Municipalidad de la Ciudad no está cumpliendo con su obligación de brindar información necesaria para la ciudadanía.

Las iniciativas: aumento de impuestos y bici sendas

El gran acierto de la semana fue impulsar el uso de la bicicleta, lo cual representa una solución para algunos, pero bajo ningún punto de vista puede ser tomado como una gran trasformación para la ciudad. Anunciado con bombos y platillos y la parafernalia que nos tienen acostumbrados, el proyecto, que -por ahora- se reduce a pintar de amarrillo una parte de la calle para que circulen las bicicletas , es un primer paso positivo aunque  siempre que se tenga como objetivo un plan de conjunto. Sin arreglo de calles y educación vial es imposible augurar que esto funcione.

Mientras todos estaban distraídos con el “chainavirus” –según Donald trump- la intendencia metió un impuestazo; ajustó el valor de la Unidad Tributaria. Se aumentaron los tributos un 18,5 por ciento, lo cual resulta sin duda un golpe al bolsillo.

Claramente el aumento, teniendo en cuenta el contexto, era discutible, pero Bettina se jugó por la suya y sacó una resolución de la agencia de recaudación, anunciando el aumento impopular. Ahora los ediles debatirán si la frenan o si al menos le piden una explicación a Bettina sobre qué piensa hacer con esa plata extra.

Guillermo Brandan no será un gran presentador televisivo pero cabe destacar que ante el despolete municipal optó por salir por la puerta de atrás y desembarcar en canal 10 en reemplazo de Elio Daniel Rodríguez, quien fue separado de su puesto por ser considerado “anticuado”. El ex secretario de prensa de “Titi” se resguardó y prefirió estar alejado de la cuestión pública. Su lugar fue ocupado por Constanza “coti” Longarte, ex productora de Canal 11, quien llegó para ordenar cuestiones menores ya que Agustina Gallo y Juan Aranda continúan sentados sobre la caja destinada a la propaganda, la cual como informamos lleva repartiendo en solo 4 meses a medios  amigos más de 20 millones.