Carrió amenaza a Cambiemos por el acuerdo Nosiglia-Angelici. Ante el consenso alcanzado en la UCR porteña de cara a la renovación de autoridades, la Coalición Cívica advirtió que si no hay marcha atrás se verán “obligados a tomar distancia” de la alianza.
Cuando parecía que había un principio de solución al conflicto de la UCR porteña, el escenario volvió empantanarse y ahora amenaza con provocar una fractura en Cambiemos. La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, salió ayer al cruce de un acuerdo entre Enrique “Coti” Nosiglia y el presidente de Boca, Daniel Angelici, quienes armaron una lista de unidad para la elección de delegados porteños al Comité Nacional. A través de un comunicado institucional de la Coalición Cívica, la chaqueña avisó que “si Cambiemos termina siendo un acuerdo entre Nosiglia y Angelici, la Coalición Cívica ARI confirma que no formará parte de este tipo de arreglos del que nos veremos obligados a tomar distancia”, dice el texto firmado por la las máximas autoridades nacionales y porteñas del partido. Según trascendió, con ese acuerdo Nosiglia podría ocupar la secretaría general del Comité Nacional, lo que produce un fuerte rechazo entre los lilitos. Además, fuentes radicales aseguran que el ex ministro de Economía, Martín Lousteau, se afiliará en los próximos días a la UCR, con lo que podría sortear el veto que le habían impuesto el PRO y Carrió al conformar en la última elección el frente Vamos Juntos.
El duro comunicado de la Coalición Cívica de ayer responde a un complejo entramado de negociaciones que involucra a radicales macristas, radicales “lustosistas” y macristas con origen radical, entre otros. El centro del conflicto es la Capital Federal, el único de los 24 distritos del país en donde no se pudo conformar Cambiemos para las últimas elecciones. El Comité Capital debe renovar autoridades a fin de año, pero la elección se judicializó por un planteo del diputado nacional electo Facundo Suárez Lastra, quien fue expulsado por integrar la lista de Carrió en vez de la lista radical, encabezada por Lousteau. Suárez Lastra, referente de la agrupación “Radicales en Cambiemos”, denunció que fue injustamente expulsado y consiguió una medida cautelar para frenar la elección. Finalmente la cautelar se cayó y la justicia convalidó la convocatoria para el 10 de diciembre.
En ese contexto se abrió una negociación para hacer una lista de unidad y evitar la competencia. La actual conducción, en manos de Emiliano Yacobitti ofreció una “amnistía” para Suárez Lastra y un lugar para ese sector en la lista de delegados al Comité Nacional que encabeza Nosiglia. El actor Luis Brandoni, integrante de Radicales en Cambiemos, rechazó esa alternativa y pidió mantener la lista propia, con su nombre al tope.
“En una decisión unilateral y prepotente sacaron una resolución que nos hizo dar el portazo. Insisten en la amnistía que no corresponde porque no cometimos ninguna infracción. Y además toman decisiones por el Comité capital que son facultad de la Convención. Quieren convertir la elección en un acto clandestino”, aseguró Suárez Lastra a PáginaI12.
Los Radicales en Cambiemos, el ala más “macrista” de la UCR porteña, mantuvieron una reunión con Angelici, quien les ratificó su intención de participar nuevamente de la vida partidaria luego de muchos años. Sin embargo, no contaban con la idea del presidente de Boca de acordar con Nosiglia y dejarlos de lado.
En ese contexto se produjo el pronunciamiento de la Coalición Cívica. Lleva la firma de su secretaria general, Maricel Etchecoin Moro, el presidente del Congreso Nacional, Maximiliano Ferraro, la titular de la CC porteña, Paula Oliveto, y de del Congreso porteño, Juan Manuel López. “No vinimos a construir una Argentina corporativa y de negocios, sino una Argentina republicana y con valores. No vamos a traicionar al electorado y a los principios fundacionales de Cambiemos”, dicen en la carta. Aseguran que su posición será planteada al interior de la alianza. Según pudo saber este diario, ya hubo conversaciones con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y su segundo, Diego Santilli.
Fuente: Página 12