Una familia salteña necesita, por mes, cinco mil pesos para no ser pobre y  $2580 sólo para poder comer todos los días. Tres de cada diez salteños no alcanzan el primer techo. Entre enero y febrero hubo una inflación del 10%. El informe fue presentado por el director del ISEPCI, Gustavo Farquharson. (DOM)

Algo extraño: el supermercado se ha convertido en un reservorio de la realidad. Alcanza con caminar por esos pasillos mirando los precios para que se fisuren los relatos mediáticos. La prosperidad, resaltada por algún diario oficial, de repente se llena de grietas y se rompe cuando el que debe comprar simplemente ya no puede.

El nuevo índice barrial de precios muestra por qué se ha abierto esta brecha: La variación mensual de la Canasta Básica Alimentaria de febrero de 2014 con respecto a enero de este mismo año es de 10,73% y la variación con respecto a igual mes del año anterior fue de 55,66% (y esto, recordemos, en el marco de una suba de sueldos escalonada -para empleados públicos- del 25%, salvo policías).

Con estas últimas subas, una familia necesita más de $5000 para no ser pobre y $ 2.581únicamente para comer todos los días. En la provincia, el nivel de pobreza para el segundo trimestre de 2013 es de 31,75% y el nivel de indigencia es 4,36%.

Para que lo dimensionen: más de 200 mil salteños no cubren la canasta familiar compuesta por 50 productos básicos.

“Hoy tenemos que una familia tipo de dos adultos y dos menores, necesita mínimamente un ingreso de $2500 para cubrir únicamente la alimentación de los 50 productos básicos. Con respecto a la línea de pobreza vimos que se necesitan por lo menos $5800 para no ser pobres y en función de esto, tenemos que más del 31% de los salteños estaría por debajo de la línea de la pobreza”, enfatizó el director del ISEPCI, Gustavo Farquharson.

Está claro que la inflación no se quiere ir. Y, aunque se anuncie y se jure que los precios están congelados, los supermercados y almacenes no paran de remarcar.

Metodología

El Índice Barrial de Precios (IBP) mide el valor de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y sus variaciones. La CBA señala el valor de los bienes que satisfacen las necesidades nutricionales (cantidades mínimas de calorías y otros nutrientes) tomando en cuenta los hábitos de consumo predominantes. El objetivo del IBP es obtener una aproximación del costo de vida, utilizando los productos de la canasta básica y sus ponderaciones. El número de productos relevados, que son los mismos que el INDEC considera, es de 50 e incluye productos de almacén, verdulería y carnicería.

El IBP comenzó a realizarse en Salta a partir del mes de agosto de 2012 a raíz de un convenio entre CIPPES, ISEPCi y Barrios de Pie. La primera etapa del proyecto consistió en un censo de negocios que abarcó siete zonas de la Ciudad de Salta, involucrando a 46 encuestadores. La cantidad de negocios censados fue de 608. A partir de esta población se seleccionaron aleatoriamente 250 comercios y en el mes de septiembre comenzó a realizarse la encuesta de precios en los negocios seleccionados.