El ex subsecretario de Tierra y Hábitat, Diego Barreto, acusado de vender terrenos estatales, fue absuelto y soltó una andanada de acusaciones. En una entrevista con Cuarto Poder contó entretelones de lo que fue su pasó por la gestión y el entramado judicial que le tocó padecer .
Fue uno de los pilares clientelares del gobierno provincial. Hizo uso de los recursos nacionales y provinciales del Estado para construir MILES. Llegó a “trabajar” codo a codo con altos funcionarios del Gobierno, pero perdió. Le tocó morder el polvo. Estuvo dos años preso y tras ser absuelto, alejado de la vida política, y ya sin compromisos, contó cuál era su papel en todo este entramado.
Barreto, responde sin problemas; seguro, veloz y fluido. Su discurso es ordenado y sin metáforas. Asegura que fue víctima de “una cama”. Que la fiscal Mónica Poma recibió órdenes para direccionar a su persona la causa y que no tiene sentido denunciar esto, porque la justicia está dominada por “los que me armaron la causa”.
Se refiere a la causa que se inició el 5 de febrero de 2016 a raíz de numerosas denuncias que señalaban que los terrenos en Parque La Vega, que el gobierno –mediante la subsecretaría que él dirigía– había entregado, fueron adjudicados por segunda vez a otros beneficiarios, a través de maniobras ilegales.
¿Cómo se acerca al actual gobierno?
Fue cuando Urtubey se lanza en el 2007 y nosotros acompañamos. Ya en el gobierno tras ganarle a Romero, en el nuevo organigrama se crea la subsecretaría de Tierras y Hábitat, y yo como era Coordinador regional de Tucumán, Salta y Jujuy de la Federación de Tierra y Vivienda, quedo a cargo para trabajar en la regularización dominial y el acceso a tierras y construcción de viviendas. Como Néstor Kirchner estaba peleado con los partidos tradicionales, nos institucionalizamos y teníamos convenios muy importantes.
¿En qué consistía su trabajo?
Tierra y Hábitat y la ayuda a las comunidades originarias era el sector mas sensible de la estructura de gobierno. Yo era consciente de eso, pero como el sistema de cooperativas funcionaba, era positivo porque solucionabas el problema de vivienda. A la vez, era un método de autoconstrucción donde los mismos cooperativistas eran los militantes, y con algo de dinero. Le pusimos muchas pilas y en un solo año entregamos 5 mil escrituras, mientras que en los 4 años anteriores se habían entregado una suma similar.
O sea que al principio se pudo descomprimir…
Como no había dinero de provincia para terrenos, nos dedicamos a regularizar los papeles. A bajar acuerdos nacionales de cooperativas, y la otra gran tarea era contener la toma de tierras. Yo tenía que ir a poner la cara.
¿Usted lo hacía?
Sí, era funcional al gobierno… Además manejaba 6 mil planes sociales. Me mandaban camiones de mercadería, a mí me parecía indignos los bolsones y yo no los quería porque comenzaban los problemas. Me venían con denuncias de que los punteros se quedaban con la mercadería, yo sentía ese peso encima y empezaba a ver que esto me restaba, estar en el Ejecutivo es complicado, era un área muy difícil.
Era un hombre afín y cercano al círculo íntimo del oficialismo…
En ese entonces, el partido MILES estaba legalizado, con un nivel de votos considerables, y eso políticamente le servía a ellos. En el 2013, Pablo Kosiner me llamó y me dijo, tenés que salir porque tenemos que llegar a la gente de barrio, y por eso me lancé. En el 2015 armamos un gran acto por la relección de Juan Manuel Urtubey, fueron 5 mil personas.
¿Y cuándo comenzó a cambiar la relación?
La demanda crecía y había un clima delicado. En Jujuy en el marco de una toma, hubo una represión donde hubo muertos. Aquí teníamos por lo menos 50 personas que eran atendidas por mesa de entrada, y encima apareció la toma de terrenos en Parque La Vega.
¿Quiénes y qué le pidieron concretamente en esa oportunidad?Carlos Parodi y Sergio Usandivaras me preguntaban cómo estaba la cosa hora a hora. Yo les decía que estaba duro, que había gente que no se quería ir, que eran activistas y que había una situación de gran necesidad. Que algunos querían perjudicar al gobierno pero que si les dábamos una respuesta contundente a la gente, iban a quedar aislados. Esteban Jesús Clemente, que después aparece involucrado en la causa, era de la Cooperadora Asistencial, en tiempos que la manejaba Cattaneo, cuando el intendente era Miguel Isa. Con él trabajaba, y fue quien me colaboró para desactivar la toma de tierras porque había changos muy intransigentes de la CCC. Sin embargo, algunos desconfiaban de mí, e incluso pensaban que yo impulsaba la toma. Incluso trajeron al Secretario de tierras de Nación, pensaban que estaba en algo raro, tal vez porque bajaba obras…
Ahí fue cuando su nombre empezó a circular por todos los medios
Al único que apuntaban cuando estalla lo de Parque La Vega era a mí. Yo veía que medios afines al gobierno empezaron a nombrarme, y me di cuenta que se venía algo pesado. Me decían que eran nuevos tiempos los que se venían, que iban a empezar a trabajar con Macri y que yo era kirchnerista, y que ya era un hecho que se terminaba Milagro Sala y que iban a meter presos a muchos, y yo no había sabido tener buenas amistades, yo no sé si querían que lo denuncie a Delia o qué, pero claramente se referían a que el poder hacia arriba había cambiado.
“Fuimos la asociación ilícita más pobre, no hablamos de millones, fíjate en los testimonios dicen que nos pagaban unos pesos por los terrenos”.
Eso le dio a entender que le estaban por “hacer una cama”
Al parecer vendieron un paquete arriba: metemos en cana a uno de Delia. Tal vez, fue una muestra al macrismo. Terminé siendo el único corrupto del gobierno. ¡Por dios!
Y la justicia ¿cómo actuó?
Fue direccionado todo el proceso hacia mi persona por Mónica Poma, que fue una fiscal política. Ella, evidentemente tuvo una orden. Nunca me hicieron un peritaje del celular cuando las llamadas están grabadas, tampoco mi computadora, si éramos una asociación ilícita mínimo teníamos que hablar por teléfono. Fuimos la “asociación ilícita” más pobre, no hablamos de millones, fíjate en los testimonios dicen que nos pagaban unos pesos por los terrenos. Diez testigos dijeron: “me pidieron que denuncie a Barreto”, era una exigencia para que le reciban la carpeta, había una persona que ni me conocía. Y cómo puede ser que la fiscal nunca le haya preguntado a mi jerárquico, es decir a Usandivaras, cuál era mi rol; él nunca declaró. Cómo no va a llamar a declarar. Fue todo muy burdo. En el ambiente de los movimientos sociales todos saben que MILES es antagónico a la CCC, y la fiscal me sindicaba como líder de la CCC, y lo sostuvo hasta el último momento. Es muy difícil que mezcle las cosas así, tan ingenuamente. Claramente buscaba manchar a todas las organizaciones sociales, para de paso dejar un mensaje de disciplinamiento y generar las sospechas de que son corruptos los que pertenecen a organizaciones sociales. En la causa dijeron que yo era un ñoqui, y como te dije era parte de la campaña para reelección y estaba en el gobierno.
“La cárcel es un sistema que está hecho para los pobres, no vi gente de plata ni apellido”.
¿Qué reflexionó cuando estuvo tras las rejas?
Estuve ocho meses en la Alcaidía, once en Villa Las Rosas, después domiciliaria y se me cruzaron muchas cosas por la cabeza; la cárcel es un sistema que está hecho para los pobres, no vi gente de plata ni apellido. Ahora pienso las cosas dos veces porque no me olvido lo que sufrieron mis familiares y la gente que quiero, me encanta la política pero voy a seguir con cautela. Aprendí un montón porque cuando era más joven pensaba que uno es exitoso con un cargo y que así te mantenés vigente en la política, ahora entendí que me confié porque hice todo lo que ellos me habían dicho pero me equivoqué, al punto de no ver venir tamaña situación.