El juez Adolfo Figueroa decidió hacer lugar parcialmente al pedido de la defensa del ex sacerdote. Aguilera permacerá detenido e incomunicado en su domicilio.

La sala IV del tribunal de impugnación a cargo de Adolfo Figueroa ordenó el arresto domiciliario del cura José Carlos Aguilera, luego de que la defensa del acusado presentara un recurso de apelación. Aguilera se encuentra acusado provisoriamente de abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de su realización agravado por ser ministro de culto; abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de su realización agravado por ser ministro de culto y abuso sexual simple agravado por ser ministro de culto en concurso real, todos en concurso real.

A partir de ahora, el sacerdote deberá permanecer en su domicilio y tiene prohibido mantener comunicación con sus denunciantes por cualquier vía. Además se fijó una consigna policial en su domicilio. En caso de incumplir estas medidas, el beneficio del arresto domiciliario podría quedar sin efecto.

Los hechos por los que Aguilera está imputado habrían ocurrido hace 15 o 20 años en la localidad de Campo Santo. El cura fue denunciado por dos personas con identidad reservada.