En la provincia de Salta los datos sobre adicciones en jóvenes son alarmantes. El 67% de las personas asistidas por consumo problemática en la provincia tienen entre 18 y 35 años. Los consumos más presentes entre estas personas son el alcohol y la pasta base. 

Por Guadalupe Macedo

 El consumo problemático es un flagelo que afecta cada día más a los jóvenes de la provincia. Según el balance de la Municipalidad del primer año del Plan de Abordaje Integral de las Adicciones indicó un aumento en el consumo de personas entre 18 y 35 años en la ciudad de Salta. Según la responsable del Plan, Patricia Suárez, «son personas que están en plena edad productiva y están desempleados». Las principales causas son el fin de una relación sexo afectiva, la pérdida de empleo y problemas judiciales. Las drogas son consumidas por muchas personas para poder afrontar diferentes situaciones difíciles como es la tensión, el estrés y los malos tratos.

Según los datos del Ministerios de Salud de la Nación muestran que el 31% de las 8.046 defunciones, fueron causadas por síndromes de dependencia del alcohol. En Salta, las defunciones por causa de dependencia del alcohol son de 2,5% por cada 100 mil habitantes. En el país, 0,8% muertes por cada 100 mil habitantes. El consumo de las drogas legales como el alcohol, las pastillas o el tabaco es muy frecuente y muchas personas no buscan ayuda por su dependencia. 

El problema del alto consumo del alcohol es el más problemático ya que desde edades más tempranas empiezan a consumirlo y a llegar a excesos. Según la titular de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Argentina (Sedronar), Gabriela Torres «este es un problema que atraviesa a todos los sectores sociales y a todas las edades -aclaró- porque pareciera siempre que es un tema de jóvenes de sectores populares y ahí hay un estigma enorme». 

El rector de la Universidad Católica Argentina, el doctor Miguel Ángel Schiavone, expresó su preocupación diciendo: “en solo 13 años, el consumo de sustancias tuvo un fuerte aumento. El Sedronar y la OEA señalaron un incremento de la prevalencia del consumo en la Argentina”. Calificó esta situación como “una epidemia que altera el bienestar del enfermo y del núcleo familiar. Y que genera un efecto en la salud física, psicológica y espiritual que termina, en algunos casos, con la muerte del enfermo, con asesinatos vinculados a la droga o con delitos”.

Las personas que se acercaron a los centros que integran el plan de Abordaje Integral de las Adicciones del gobierno de la ciudad el 67% tienen entre 18 y 35 años le siguen personas de entre 36 y 50 años, con un 18%; un 10% está compuesto por personas de entre 51 y 65 años. Solo un 3% corresponde a adolescentes de entre 13 y 17 años; un 1% es mayor de 65 años. Debemos destacar que un 1% está integrado por niños y niñas menores de 12 años. La responsable Patricia Suárez informó que “un 90% padece consumo de alcohol, un 85%, pasta base, un 60% tiene consumo problemático de marihuana; un 20% es adicto a la cocaína, el 20% padece tabaquismo, el 15%, consume inhalables y un 5%, es adicto a la ludopatía u otras conductas comportamentales”. La funcionaria explicó que, de las 95 personas asistidas, el 55% son mujeres.

Los «problemas personales» son uno de los principales motivos de consumo de sustancias psicoactivas para la población adolescente y, un 80%, se siente «poco o nada» escuchada por los adultos, advirtió a Télam la titular de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Argentina (Sedronar), Gabriela Torres. Las adicciones son una problemática que tiene un trasfondo donde se esconden otras problemáticas sociales como es la falta de contención, la pobreza, la falta de acceso a derechos humanos como el trabajo y la educación. 

Los «problemas personales» son uno de los principales motivos de consumo de sustancias psicoactivas para la población adolescente y, un 80%, se siente «poco o nada» escuchada por los adultos, advirtió a Télam la titular de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Argentina (Sedronar), Gabriela Torres. Agrego «hay un estereotipo que vincula a las drogas ilegales a una cierta oposición a la sociedad, lugar que se le ha dado a les jóvenes, pero esas homologaciones no hacen más que reforzar estereotipos y respuestas punitivas, cuando en realidad sabemos que muchas veces el consumo de sustancias tiene más que ver con poder no oponerse, sino adaptarse, a ciertos imperativos sociales que nos va exigiendo la sociedad capitalista en la que nos movemos».

“El proceso de adicción, desde que se inicia con un consumo hasta que la persona llega a un tratamiento, tiene un promedio de tres años. Además de que la mayoría de las demandas surge por un tercero (familiar o conocido) que pide asistencia para la persona afectada” afirmó Patricia Suárez. En la provincia para tratar las adicciones existe el Plan de Abordaje Integral de las Adicciones donde para ser atendidos de manera gratuita pueden pedir turno en el Dispositivo Territorial Comunitario (DTC) de San Benito o bien a través de las redes sociales del Plan municipal de Abordaje Integral de las Adicciones (Facebook e Instagram).