La política del blanqueo de capitales naufraga irremediablemente. Hasta ahora sumaron 710 millones de dólares, una cifra muy por debajo de los 60 mil millones de dólares que proyectó el Gobierno. A fin de mes se viene un vencimiento clave.
En el Ministerio de Hacienda dejaron trascender desde un inicio que con el Régimen de Sinceramiento Fiscal se podrían llegar a blanquear unos 60.000 millones de dólares. Esa cifra incluso fue mencionada públicamente por el titular de la Bolsa de Comercio, Adelmo Gabbi, y la semana pasada la reiteró en el Coloquio de IDEA el titular del HSBC, Gabriel Martino. Algunos fueron todavía más optimistas y hablaron que podrían llegar a ingresar 100.000 millones de dólares debido al cambio de expectativas que se generó con la llegada de Mauricio Macri al poder. Sin embargo, hasta el momento las cifras que maneja la AFIP están muy por debajo de esas proyecciones. A mitad de la semana pasada, el titular del organismo recaudador, Alberto Abad, tenía contabilizados como ya ingresados al blanqueo unos 11 mil millones de pesos, unos 710 millones de dólares al tipo de cambio oficial, y el ingreso para el fisco en concepto de impuestos representaba apenas unos 625 millones de pesos.
El blanqueo había comenzado extremadamente lento. A comienzos de septiembre, la AFIP informó en una de las planillas de la recaudación subidas a su página web que en agosto, el primer mes de vigencia, se habían embolsado apenas 42 millones de pesos por el blanqueo de capitales, es decir, algo menos de 3 millones de dólares. El número era tan insignificante que la propia entidad luego borró ese dato de la web y lo incluyó dentro del rubro otros. Ahora mejoró un poco, pero lo recaudado sigue estando muy lejos de las expectativas oficiales y el tiempo que resta es cada vez menos. De hecho, el próximo lunes es el último día para blanquear el efectivo que los contribuyentes tienen no declarados en el país, ya que si bien el vencimiento es el 31 de octubre, el 24 de octubre vence el plazo para generar el volante de pago (VEP) en tiempo y forma. El texto de la ley no permite prorrogar el vencimiento, por lo que para poder hacerlo debería salir otra ley aprobada por el Congreso. Para este caso especial se requerirá además la inmovilización del dinero exteriorizado por un lapso de seis meses. A su vez, el vencimiento del plan para los demás bienes será el 31 de marzo de 2017.
Fuente: Página 12