Los concejales aprobaron la donación de un terreno de la Cerámica del Norte que será anexado al relleno sanitario de la capital provincial.
A pesar de los informes ambientales y sanitarios que confirman los efectos en la salud que produce la cercanía al vertedero San Javier, el Concejo Deliberante decidió por unanimidad anexar una parcela perteneciente a la empresa Cerámica del Norte al sumidero.
Se trata de un terreno de importantes dimensiones, que la empresa de cerámica utilizaba para obtener arcilla y que hoy no se puede explotar, dado que el material fue extraído prácticamente en su totalidad.
Cabe destacar que, según la ley, la empresa cerámica debería resarcir el pasivo ambiental que dejó durante su actividad. En lugar de ello, la firma optó por regalar el terreno al municipio para que éste, a su vez, lo deje en manos de Agrotécnica Fueguina.
Con esta expansión, la distancia que separa los montículos de basura de las viviendas de Barrio Justicia se acorta a 166 metros. El funcionamiento del vertedero ya generó consecuencias en los barrios Justicia, Los paraísos -Cerrillos-, Solidaridad III y IV etapas. Las mismas fueron reflejadas en un informe del Ministerio de Salud Pública que da cuenta del incremento de casos de Hepatitis y Parasitosis intestinal en esa zona.
Los vecinos afectados lograron que se introduzca un artículo a la ordenanza que impide que en el lugar se arrojen otros residuos que no sean escombros y que obliga a realizar controles periódicos. Sin embargo, dudan de que esta última condición se cumpla.
Jorgelina Franco, vecina de la zona sudeste, comentó a Cuarto Poder: «Estamos totalmente indignados como vecinos (…) Ese vertedero no tiene ningún control, tememos que se coloque otro tipo de residuos y que eso perjudique aún más a los vecinos».
