Los partidos del Frente de Izquierda se juntaron para organizar el acto del 1º de mayo pero discutieron sobre Brasil y terminaron organizando dos: el PO y la IS lo harán el 1º de Mayo; el PTS de Nicolás del Caño lo hará un día antes.

Las discusiones entre los viejos cuadros de la izquierda trotskista en la Argentina se iniciaron el miércoles en la mesa nacional del FIT. Allí llegaron las huestes de Nicolás del Caño con una idea importante: que el acto del 1º de Mayo que conmemora el Día del Trabajador incluya un repudio al “golpe de Estado Institucional” en Brasil.

La buena idea lo pudrió todo. Y es que resultó que los otros integrantes del Frente no estaban muy de acuerdo con la postura. La fuerza Izquierda Socialista se negó a considerar que se trate de un golpe institucional sino un “juicio político más”.

El resultado terminó como casi siempre: el PTS hará el 30 un acto “contra el golpe en Brasil y el ajuste de Macri y los gobernadores”, frente a la embajada brasileña para expresar “un repudio concreto al avance de la derecha en la región”. El PO y el IS, mientras tanto, piden que no se rompa el acuerdo para un acto unitario en Plaza de Mayo y alertaban sobre una nueva grieta en el FIT.

“Vemos un intento raro de generar una crisis aprovechando una diferencia circunstancial, no es un acto sobre Brasil sino sobre el 1º de mayo”, dijo Gabriel Solano del PO a Página/12. “No enfrentar este golpe es el mismo error que apoyar a las patronales agrarias como hizo el MST, es inadmisible para una corriente internacionalista como somos, en un acto internacionalista, no mencionar el golpe en Brasil en la consigna de convocatoria”, replicó Christian Castillo del PTS. Ese partido, que sostiene que “las consignas no son abstracciones ni saludos a la bandera sino algo concreto”, consideró que la aprobación en el Parlamento brasileño del juicio político contra la mandataria es “un golpe institucional impulsado por la derecha para aplicar más ajuste en el país vecino”, y que la gravedad de esa situación obligaba a modificar el escenario del acto del 1º de mayo.

El PO coincide en la caracterización de los sucesos en Brasil como “golpe institucional”, pero se negó a cambiar el acuerdo establecido con IS, quienes sí difieren a la hora de ponderar el jaqueo a Rousseff al considerar que “es un juicio político como tantos otros”, y prefieren levantar la consigna de “que se vayan todos”. En un comunicado, IS expresó que “sorpresivamente el miércoles, los dirigentes del PTS presentaron en la mesa nacional del FIT un cambio radical en los ejes de la convocatoria pasando a proponer que la consigna central debía ser ‘abajo el golpe en Brasil’ y que el acto debía hacerse frente a la embajada de Brasil”. Para Juan Carlos “Gringo” Giordano, dirigente de IS, “no se puede poner en cuestión el acto, y menos con un ultimátum, sino no existe el FIT”. Tras explicar que para su agrupación “hablar de golpe (en Brasil) es justificar la continuidad de los planes de ajuste”, Giordano expresó su deseo de que “el PTS abandone su postura”.