Las internas políticas salteñas continúan siendo noticia nacional. Se habla de una campaña con denuncias, chicanas y acusaciones entre Romero y Urtubey con pocos precedentes en la provincia.

El diario Clarín publicó este viernes un artículo donde habla de la lucha política salteña entre el oficialismo y el romerismo. La nota se titula “Más cruces en la campaña salteña” y habla de denuncias, chicanas y acusaciones con pocos precedentes en la provincia.

A continuación, compartimos la nota completa:

Hace 20 años que se reparten el manejo de la provincia. Juan Carlos Romero (64) la gobernó desde 1995 hasta 2007, con Carlos Menem y Néstor Kichnner en la Rosada. Juan Manuel Urtubey (45), que fue funcionario de Romero, tomó la posta con Cristina. La ganas coincidentes de ambos, uno por volver, el otro por quedarse, los encuentra hoy en una campaña con denuncias, chicanas y acusaciones con pocos precedentes en la provincia.

A 20 días de las primarias provinciales, ayer Clarín contó el carpetazo que decidió ofrendarle un candidato a diputado provincial de Libres del Sur a Romero, actual senador, aliado massista, por sus viajes al exterior desde 1986 a la fecha. Según se detalló, 221 salidas fuera del país, a un costo de 1.671.000 dólares. Unos 1.500 días en el exterior.

La respuesta desde el PJ disidente la dio un diputado provincial, cercano a Alfredo Olmedo, el compañero de fórmula de Romero. Denunciaron al al intendente de Salta y precandidato a vicegobernador por el oficialismo, Miguel Isa, «por beneficiar a familiares y amigos con contrataciones directas por más de 20 millones de pesos».

Previsible, vino la respuesta desde el entorno de Isa. Quien tomó la posta fue su secretario de Gobierno de la capital salteña, Mauro Sabbadini, en este caso para acusar a Romero por la «obscena campaña» en la que se ofrecen «incumplibles» planes de viviendas a los vecinos.

«Todos sabemos que el déficit habitacional es un problema pero no exclusivamente de Salta. Es un problema de la Argentina. Una de cada tres personas tiene ese déficit. No obstante nos parece lamentable que con un fin electoralista se manipulen la ilusiones de los que ansían una vivienda», dijo Sabbadini, uno de los hombres más cercanos al intendente.

Desde el kirchnerismo salteño revolean también el árbol genealógico de Romero: «Su padre ya había prometido en la década del 80 un plan similar que nunca cumplió, porque es imposible llevar adelante la promesa. No hay mecanismos de financiación provinciales para sostener el plan de viviendas que está prometiendo».

¿Por dónde vendrá ahora la respuesta del romerismo?