Al jefe de la policía salteña le preguntaron por los apremios ilegales repetidos en diferentes oportunidades y lugares. No los negó, y además agregó que él, durante sus épocas, prefería el método investigativo al disuasivo.
Con motivo de la conmemoración de un aniversario más de la institución azul, Marcelo Lami, dio declaraciones en las que, como no puede ser de otra forma, alabó la presteza de sus subordinados a la hora de arremeter contra el delito, también reconoció que a pesar de los “esfuerzos” realizados, lo mismo se comen una puteada de vez en cuando por parte de los vecinos que no miran con buenos ojos el accionar policial en los barrios, nos referimos al abuso de autoridad que bien datado está en las distintas noticias que se publicaron desde que Lami está a cargo de la fuerza policial (y también mucho antes).
Al respecto el Comisario indicó que «hay denuncias y hechos comprobados, como Güemes y Orán”, a los que habría que sumarle los de la capital y el resto de los departamentos, pero que como son moneda corriente, tal vez a Lami se le olvidó recordarlos.
Además mencionó que en sus épocas pasadas (hace 30 años que forma parte de la policía) él prefería otro tipo de métodos: «Yo, al menos cuando trabajé, mi estilo siempre fue la investigación».
Consultado por las declaraciones de Vilte Laxi durante la primera jornada del juicio por el caso de las turistas francesas, en las que dijo haber sido sujeto de una “investigación” policial a la salteña, esto es: haber sido picaneado, submarineado e interrogado, al parecer, según los métodos del manual Kubark, Lami respondió: «estamos hablando de un imputado que tiene subjetividades».
