“En el movimiento obrero existe mucho malestar y enojo con las medidas tomadas por el Gobierno”, dijo Juan Carlos Schmid, integrante del triunvirato de la CGT. Afirmó que hoy “seguramente” convocarán a una medida de fuerza.
“Estamos en condiciones de afirmar que vamos a suspender nuestra participación en la Mesa de Diálogo por la Producción y el Trabajo porque se quebró la confianza”, aseguró ayer uno de los tres líderes de la CGT, Juan Carlos Schmid, dando por cerrada la instancia de negociación que mantenían con el gobierno nacional y los empresarios. Hoy, a las 14, se reunirá el consejo directivo de la central obrera para discutir los pasos a seguir, que contemplan “una medida de fuerza” en marzo. Los gremios del sector industrial se mantienen alerta y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) convocó a una movilización para el 14 de febrero ante los despidos, las suspensiones y el cierre de empresas.
“En agosto, cuando el triunvirato que integro se hizo cargo de la CGT, había de parte del Gobierno una voluntad de diálogo. Discutimos el tema de Ganancias y logramos que se aprobara en el Congreso la emergencia social. Pero ahora el panorama cambió. Los precios podrán ser transparentes, pero si los sueldos son flacos no se puede hacer nada”, destacó el dirigente de la Federación Marítima Portuaria, anticipando el ánimo de los representantes sindicales a la hora de sentarse a definir hoy la respuesta de los trabajadores a la situación económica. ¿Cuál va a ser la medida que va a analizar hoy la CGT? “Se va a definir en la reunión. Todos los gremios van a dar su postura y seguramente de ahí salga una medida consensuada para marzo”, señalaron a PáginaI12 fuentes gremiales.
La novela entre la dirigencia de la CGT y el gobierno nacional va por un nuevo capítulo, después de las medidas de ajuste que durante el último año generaron miles de despidos en el sector estatal, pérdidas de las fuentes de trabajo en el sector privado, y tarifazos en los servicios públicos, sin medidas de fuerza por parte de la CGT. La central obrera logró reunificarse en agosto pasado, apostando a un triunvirato que mantenga el equilibrio interno; a partir de allí la negociación con el Gobierno tomó otra forma. Se creó la mesa de diálogo tripartita junto a funcionarios y empresarios: allí se firmó un acuerdo antidespidos que nunca se cumplió, y tras los nuevos anuncios de aumentos de tarifas, la CGT decidió la ruptura de la mesa y el anuncio de medidas.
“Hemos dialogado con los funcionarios de la cartera de Trabajo, pero acá hay cosas que los exceden. Estamos frente a una apertura de importaciones que perjudica el trabajo de los argentinos y la producción nacional. Así no podemos seguir”, afirmó Schmid, que también lidera la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), aludiendo a la reunión que tuvieron el martes con el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, donde se les anticipó la imposibilidad de resolver sus reclamos ante la continuidad de los despidos, las paritarias que están cada vez más cerca y la flexibilización laboral que piensa implementar el Gobierno.
“En el movimiento obrero existe mucho malestar y enojo con las medidas tomadas por el Gobierno desde que empezó este año. Suben las tarifas, los precios, y siguen las suspensiones y despidos. Mañana (por hoy), en la reunión del Consejo Directivo seguramente convocaremos a una medida de fuerza”, sentenció Schmid convencido de la resolución que se tomará en la cúpula del CGT. “Nos encontramos ante el incumplimiento de los empresarios y la apatía del Gobierno a la hora de hacer respetar los acuerdos que se alcanzaron”, había apuntado antes, poniendo la mira en los compromisos quebrantados por el resto de los integrantes de la mesa de diálogo.
En la reunión del consejo directivo, los dirigentes gremiales analizarán la situación de los despidos y suspensiones, las consecuencias laborales por la apertura de las importaciones y también evaluarán el decreto de necesidad y urgencia que modifica la ley de ART, que los sindicalistas ya rechazaron. Además, en la agenda del día figura la intervención que la cartera laboral dispuso de la Federación de Empleados de la Industria Azucarera, que se encuentra en concurso de acreedores desde el año 2000. Mientras, los gremios industriales ya muestran su enojo y anunciaron una movilización para el 14 de febrero por la crisis que atraviesan los trabajadores y las empresas del sector.
Fuente: Página 12