El centro de cómputos del partido amarillo SST se prendió fuego ayer por la tarde, el mismo se inició en una vivienda colindante y se extendió hacia la edificación que guardaba en su interior afiches y demás papeles de campaña. No se registraron mayores daños salvo la psiquis de los olmedistas que ahora andan paranoides.
El inmueble en cuestión está ubicado en Pasaje Miguel Tedín 370, zona de la Terminal y cerca de las 17 horas de ayer se prendió fuego no una, sino dos veces. El incendio al parecer fue casual, se inició en la vivienda de al lado y pasó hacia el centro de cómputos que en ese momento no se encontraba vacío, en él estaban cerca de 10 personas que se encargaron de aplacar el fuego que “Comenzó en la parte trasera en el fondo de atrás de la vivienda, fue preocupante porque ahí tenemos todo el tema papel, la folletería” comentó uno de los representantes amarillos, Alejandro Paverini.
“La propia gente se subió a los techos para alcanzar un tanque de agua y combatir las llamas, otros vecinos también nos alcanzaron agua y lo apagamos. A los diez minutos se vuelve a incendiar el centro, por lo intervienen los Bomberos” comentó luego.
Y como no podía ser de otra manera la sospecha y la duda por un posible atentado no se hizo esperar, porque si no son ciertas estas sospechas, de todos modos funcionan como un buen elemento de campaña, la victimización siempre garpa.
Al ser consultado por el suceso, el hombre de la gorra amarilla y sonrisa ratonezca mencionó: “Yo tengo mis grandes dudas respecto a lo que ocurrió, es muy prematuro afirmar algo, pero resulta al menos curioso que esto ocurra a poco de que yo denuncio amenazas sobre mi persona”. A pocos días de los comicios todo vale y todo suma, y este tipo de publicidad les cae del cielo (o del infierno) a los candidatos amarillos.