Preso hace más de un año y a la espera del juicio por un crimen que dice no haber cometido, el comisario Claudio Burgos reconoció que pensó en suicidarse.
Desde el penal de Villa Las Rosas donde espera el juicio por el asesinato por gatillo fácil, el comisario Claudio Burgos reconoció que pensó en matarse. “No me da vergüenza decir que pensé en quitarme la vida para evitar el deshonor, la burla, el dolor de mis familiares”, dijo el policía.
A pesar de que ninguna prueba científica lo incrimina, Burgos está preso desde hace un año y cuatro meses acusado de la muerte de Gabriel Mura Ortíz en un confuso operativo realizado en Barrio Sarmiento.
“Siguiendo a un par de motochorros, en la noche del sábado 16 de noviembre del año pasado -por 2013- una patrulla de motoristas comandada por Burgos ingresó al Barrio Sarmiento. El desenlace de ese operativo fue fatal. Una persona, Gabriel Mura Ortiz, fue muerto por una bala policial mientras que Burgos y otros 3 efectivos de la fuerza terminaron presos”, informó en su momento Cuarto Poder.
“Según la familia de la víctima el operativo policial fue realizado con premeditación y alevosía. Por motivos que aún no están claros los policías se enfrentaron con un grupo de vecinos y terminaron ultimando a quemarropa al malogrado. Mi papá quiso evitar que le peguen a dos chicos y un policía lo invitó a pelear. Los demás hicieron una ronda y se pelaron mano a mano pero cuando mi papá lo volteó, le dieron un tiro por la espalda, relató Gabriela, hija de Mura Ortiz” dice la crónica publicada en octubre del año pasado.
“Burgos, en cambio, asegura que el enfrentamiento fue inevitable porque los vecinos emboscaron a la policía cuando intentaron detener a los motochorros pero niega que haya habido tal combate personal. Como sea, Mura Ortiz murió por un disparo letal de arma policial. Pero Burgos estaba desarmado. Según su testimonio avalado por los registros oficiales de esa noche, el comisario estaba dotado sólo de un arma marcadora similar a las pistolas de paint ball que la policía comenzó a utilizar en los últimos meses” añade el texto titulado “Un asesino entre policías”.
Ahora, el desgarrador testimonio de Burgos reconociendo que pensó en el suicidio trae a la memoria de los salteños lo sucedido con el ex jefe de la Brigada de Investigaciones, Néstor Piccolo. Ocurre que al igual que aquel, Burgos es un oficial varias veces condecorado y de alto rango en la Policía de Salta.