Ronaldo cree que «Argentina se va a clasificar” al Mundial de Rusia, pero consideró que “tiene que apurarse». La leyenda brasilera habló antes del choque de las dos selecciones más importantes del continente.

Ronaldo -el original, el de Brasil, el gordo más querido de la historia del fútbol universal- luce agitado. No es para menos: acaba de subir las aparentemente interminables escaleras del estadio Azteca. Se comprueba: la sonrisa no se borra por cansancio. Esta allí, sentado a pocos metros del arco -quizá- más famoso de la historia del fútbol universal, el de la Mano de Dios, el del Mejor Gol de la Historia. Llegó aquí invitado por Nike Total Football Training, para recibir un homenaje: será incluido en el Salón de la Fama del Fútbol, ubicado en Pachuca. Y claro, visto con ojos argentinos es una ocasión inmejorable para referirse al partido inminente: el Superclasico, en Belo Horizonte. El Fenómeno -ese apodo que sirve de definición para su recorrido de futbolista- responde:

-¿Cómo imaginás el partido?
-Será duro. Siempre es duro cada clásico entre nosotros. No es nunca fácil para ninguno de los dos. Hay grandes jugadores de los dos lados. Y la expectativa siempre que se juega un partido así es que sea un gran espectáculo.
-¿Tenés algún recuerdo preciso de algún partido contra la Argentina?
-Si, cuando les ganamos tres a uno, con tres goles míos…
-Los tres de penal…

Ronaldo se ríe. Y ofrece su respuesta con folclore de archirrival: -Si, pero tres. Igual tranquilo, esta vez tendrán la suerte de que no me toca jugar….

-Argentina no llega del mejor de los modos: sexto, entre dudas… ¿Puede influir eso en el desarrollo del juego?
-No. En estos partidos siempre hay otra historia. No importa mucho lo que pasó o viene pasando.
-Hoy las posiciones dicen que la Argentina este quedándose afuera del Mundial: ¿Te imaginás Rusia 2018 sin Argentina y sin Messi?
-No, de ninguna manera. Estoy seguro de que Argentina se va a clasificar. Eso sí, tiene que apurarse…
-Parece la eliminatoria más difícil…
-Si, es complicada. Hay muy buenos equipos. Y también es muy cambiante. Brasil estaba mal y ahora, poco tiempo después, marcha primero.

Ronaldo -bicampeón del mundo, segundo máximo anotador en Mundiales- es un personaje atractivo por donde se lo aborde. Y en el recorrido de temas diversos, ofrece frases interesantes: “Chile fue un merecido campeón de las últimas dos Copas América. Tiene una excelente generación de jugadores capaces de competir contra cualquiera. Y eso es lo que viene demostrando desde hace varios años”. Y evoca a uno de sus mejores amigos dentro del fútbol, Ivan Zamorano: “Hace bastante que no lo veo. Y ya lo extraño. Una hermosa persona, un gran jugador”. Cuenta también que le quedó la cuenta pendiente de “jugar en este imponente Azteca, de tanta historia”.

-¿Qué diferencias notás entre el fútbol de hoy y el que te tocó jugar en tus mejores días?
-Creo que estamos en un fútbol en constante evolución. Desde lo físico, la velocidad, la preparación y también desde lo técnico. En el alto nivel ya no quedan futbolistas que no tengan capacidad para pasarla con ambas piernas, hace diez años no era tan frecuente.
-¿Y percibis alguna ausencia, algo que falta?
-Tal vez ahora ya casi no está ese diez clásico, el que quizá era un poco lento, pero siempre sabías que cuando tenía la pelota algo bueno sucedería.
-Fuiste, quizá, el mejor nueve de la historia: ¿cuál es la receta para llegar y mantenerse en la élite?
-Lo principal es tener siempre el cien por ciento de dedicación. En ofrecer lo mejor.
-¿Te gustaba entrenar?

Ronaldo se ríe, otra vez, y cuenta su historia en ese rubro: “El entrenamiento fue avanzando muchísimo. Cuando yo entrenaba en Brasil, de más chico, corríamos un montón, dos, tres horas. Y todos igual sin tener en cuenta las características del jugador o el puesto. Me hacían el test de Cooper y terminaba último. Me hacían correr larga distancia con Cafu y no lo alcanzaba nunca. Eso sí, en distancias cortas siempre terminaba primero. Yo era un jugador de velocidad”.

-Pasaste por varios de los mejores clubes del mundo y por la selección más exitosa: ¿Quienes fueron las personas que te marcaron?
-A Mario Zagallo quizá debería ubicarlo primero, pero no me puedo olvidar de otros grandes entrenadores. Como Luiz Felipe Scolari que me llevó al Mundial de 2002, aunque yo llegaba sin ritmo. Y por suerte le pude devolver esa confianza de la mejor manera. Y también a Vicente del Bosque, a quien tuve en Real Madrid. Todos me enseñaron algo. Y todos tenían algo en común: sabían hacer sentir cómodo al jugador.

La presencia de Ronaldo resulta un evento para La Ciudad, como le llaman a la capital mexicana. Genera fascinación. La gente le manifiesta su cariño al descubrir su rostro redondo y su sonrisa ancha. Le piden fotos, saludos, autógrafos. El accede a todo

-¿Cuál es la sensación que te genera ser tan querido y celebrado en Latinoamérica, incluso en la Argentina y a pesar de la rivalidad?
-Siempre es muy lindo sentir el cariño de la gente. En cualquier lugar. Por eso yo siempre agradezco eso. A la gente y al fútbol

Fuente: Clarín