Basado en un estudio que pidió al INTI, el Ministerio de Salud pide que no se distribuyan las cunas y bolsas de dormir; el programa, impulsado por Cristina Kirchnner, es investigado en la Justicia.
Ministerio de Salud de la Nación suspendió la entrega de los kits del polémico Plan Qunita que impulsó el gobierno de Cristina Kirchner. La decisión se basa en un informe del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) sobre la seguridad de los dispositivos que ofrece el programa, en particular las cunas y bolsas de dormir.
Así lo confirmó a LA NACION el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, que adelantó que acatará la decisión nacional. «Nación le envió un informe a la ministra con motivo de que se decidió suspender el programa», revelaron desde la cartera que dirige desde diciembre Zulma Ortiz. No hubo alusión en el pedido a la causa que investiga en la Justicia el programa maternal.
La Subsecretaría de Atención de Primaria de la Salud y la Secretaría de Promoción de Programas Sanitarios y Salud Comunitaria solicitaron formalmente a la ministra bonaerense que «por motivos de precaución tengan a bien cesar la entrega de las cunas y las bolsas de dormir que integran el kit y de arbitrar los medios necesarios a fin de que los hospitales bajo su dependencia preventivamente tampoco hagan entrega de esos dos items integrantes del kit [por las cunas y bolsas de dormir] en caso de que los hubiera recibido».
El pedido de Salud nacional es «hasta nuevo aviso», ya que se encargó una nueva evaluación de los productos. No descartan que pueda continuarse la distribución.
En el INTI revelaron a este medio que el informe que motiva la decisión fue confeccionado el año pasado y fue un pedido del Ministerio de Salud nacional.
El Plan Qunita nació envuelto en sospechas. A mitad de 2015, la legisladora porteña de ECO Graciela Ocaña denunció penalmente la millonaria licitación a partir de un artículo del sitio Eliminando Variables. Los kits maternales anunciados por la presidenta Cristina Kirchner en julio pasado fueron fabricados en su mayor parte por una inmobiliaria, Fasano SRL. Se trató de un negocio de casi mil millones de pesos con el Estado que es investigado por el juez federal Claudio Bonadio ya que la razón social de la empresa no se correspondería con el objeto de la contratación.
El año pasado, el magistrado citó en el marco del caso al entonces ministro de Salud, Daniel Gollán, y al gobernador de Tucumán, Juan Manzur, así como al aún jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. La ejecución de la millonaria partida presupuestaria estuvo a cargo de la Secretaría de Salud Comunitaria, que dirigía el militante de La Cámpora Nicolás Kreplak, ex viceministro de Salud.