El gobierno  provincial colapsó su propio sistema carcelario. En seis meses aumentó un 20% la población carcelaria. La gestión del caos.

Es de no creer, pero el gobierno provincial toma medidas sin medir siquiera las consecuencias más evidentes.  Hace menos de un año “provincializó” la lucha contra el microtráfico de drogas, una medida que apenas tomaros 3 provincias sobre 24 distritos políticos del país. La persecución de perejiles con un gramos o consumidores con un porro se vino denunciando intensamente en los últimos meses. Además de todo esto, la “provincialización” también colapsó el sistema carcelario salteño.

Lo triste es que no sorprende que el gobierno logre ser tan deficiente. En apenas meses de aplicación lo único que logró la gestión Urtubey fue un par de propagandas para sus ministros y también incrementar la población carcelaria salteña. En apenas seis meses el gobierno incrementó un 20% la cantidad de presos. Para colmo el 90% de los detenidos permanece en calidad de imputado no juzgado. Por cada uno de esos reos la provincia paga cerca de 30 mil pesos por mes. El flagelo que se pensaba combatir crece en las calles, mientras el Estado llena sus cárceles sin mucho sentido. Cuarto Poder en los últimos meses advirtió sobre esta situación a través de sus artículos y comentarios periodísticos, pero nada detiene a quien está equivocado creyéndose en razón.

Ayer mismo fue el Ministro de Seguridad, Alejandro Cornejo, quien admitió que la población penal “excedió las proyecciones del gobierno”. Es decir los superó la ola que ellos mismos generaron con una “decisión política”. A una radio capitalina Cornejo indicó que “la población penal excedió las proyecciones que se hicieron con la puesta en marcha de la reforma del Código Penal y la intervención de la provincia en causas por microtráfico de estupefacientes. La cantidad de personas con prisión preventiva fue superada abismalmente, en el primer trimestre se alcanzó la proyección anual”. El ministro reconoció que hay “falta de espacios tanto la Alcaidía como las comisarías”. Los detenidos por la provincialización son más de 400, sobre una población carcelaria total de 2200 presos.  Casi feliz, el funcionario responsable de la seguridad en Salta, anunció que se construyen más cárceles. Olvidó mencionar Cornejo que cada uno de esos presos cuesta unos 30 mil pesos mensuales, si se tiene en cuenta que cada preso federal representa un costo de 41 mil pesos por mes. La cifra salteña por esos 200 presos llega mensualmente a los 6 millones de pesos. En un año los presos de Cornejo son una inversión mayor al boleto gratis para jubilados y estudiantes (40 millones). Quizás sea momento de recordar a la inolvidable Lelia Chaya, cuando trató en vano de explicarle a los cronistas de la tv nacional, el significado para los salteños de la palabra OPA.