Epidemiólogos Argentinos Metadisciplinarios, es un grupo que decidió ocuparse de estudiar la problemática sanitaria de la pandemia por COVID-19, desde otros puntos de vista. En su análisis cuestionaron la rigidez y la extensión de la cuarentena, tras cuatro meses de aplicación de las medidas de excepción. Advirtieron sobre la continuidad de decisiones sanitarias que se habían tomado solamente en función de una emergencia y afirmaron que con su prolongación están generando efectos perjudiciales para la salud comunitaria, la economía doméstica y hasta para los ritos religiosos.
La mirada epidemiológica alternativa de estos profesionales cuestionó por sobre todo el papel del equipo de infectólogos que asesora al Presidente, por encima de “las experiencias y saberes establecidos en la epidemiología, la antropología, el derecho, la sociología, la psicología social y la gerontología, entre muchas otras”.
Para poner en jaque al equipo presidencial, estos expertos hicieron público un listado con 16 preguntas enviadas directamente a Alberto Fernández con el objetivo de disipar la incertidumbre futura.
¿Por qué se instrumentó una cuarentena para individuos sanos cuando no hay registro de tal restricción en la historia de la humanidad? ¿Qué criterios científicos y particularmente epidemiológicos se aplicaron para extender la cuarentena total a cinco provincias sin casos y a otras seis con uno o dos casos? ¿Por qué no se le dio suficiente importancia a la producción natural de anticuerpos por vía del contagio en población no vulnerable, privilegiando la inmunidad adquirida mediante vacunas?, son algunas de las preguntas.
La misiva está firmada por más de 40 profesionales de la medicina. Algunos de ellos recordaron que fueron alumnos de los actuales asesores del Presidente y que en aquel entonces sostenían que si estabas encerrado te bajaban las defensas y “ahora nos tienen ‘presos’ hace 120 días”. La peor forma de atacar una pandemia es encerrarse. Necesitas el sistema inmunológico fuerte. “Lo que le recomiendan al Presidente es un disparate”. Y concluyeron la carta poniéndose a disposición de Alberto Fernández para asesorarlo y despejar esas 16 dudas que presentaron en forma de preguntas.
De la grieta no se salva nadie…