Los padres de dos de los cuatro brigadistas muertos en Guachipas el año pasado denunciaron al ministro de Seguridad de la provincia. Aseguran que no cumplió con sus deberes de funcionario y quieren que se investigue un posible encubrimiento.

Los padres dos de los brigadistas muertos en un incendio forestal en Guachipas denunciaron al ministro de Seguridad, Alejandro Cornejo D’Andrea, por supuesto incumplimiento de los deberes de funcionario público y posible encubrimiento.

El Tribuno informó que los padres de Martín Albarracín y Mauricio Valdez reprochan a Cornejo no haber formulado denuncia incluso cuando le constaba que hubo «falseamiento de los elementos que se denunciaron como equipamiento del personal afectado; que no contaban con GPS, Handy, linterna, binocular, brújula y botiquín de primeros auxilios como informó (el entonces subsecretario de Defensa Civil, Víctor) Ola Castro; hubo falta de comunicación continua y se limitó al envío de SMS por celulares en zona de baja o nula señal».

Omar Valdez y Pedro Albarracín denuncian que hubo negligencia. Pedro Albarracín y Omar Valdez sienten que el Estado les dio la espalda. Primero, a sus hijos, que formaron parte de una brigada que iba a quedar librada a su suerte; luego, cuando los mandaron a apagar un incendio descomunal que finalmente se apagó solo. Tras las muertes, injustas e injustificadas, escucharon con asombro la interpretación del gobernador: «Un accidente que está dentro de lo previsto», dijo Juan Manuel Urtubey.

«El gobernador nunca nos recibió», advirtió Omar Valdez. «No nos recibió él ni tampoco encontramos respuesta en ningún funcionario. Nosotros no pensamos que fue un accidente ni que forme parte de los riesgos del oficio. Estamos convencidos de que los mató la negligencia».