Una nueva moneda

 

Ahorrar es una de las cosas que todos los argentinos quieren hacer y un nuevo método que surgió son las monedas digitales. Te contamos los pro y contras y como operan en el mercado. (Guadalupe Macedo)

Las criptomonedas son “un activo digital que emplea un cifrado criptográfico para garantizar su titularidad y asegurar la integridad de las transacciones, y controlar la creación de unidades adicionales, es decir, evitar que alguien pueda hacer copias como haríamos, por ejemplo, con una foto. Estas monedas no existen de forma física: se almacenan en una cartera digital” define a la moneda digital el banco Santander.

Las principales monedas digitales que existen son Bitcoin, Ehtereum, Fan Tokens, NFT y un gran mercado de Criptoactivos que se conectan con una tecnología denominada Blockchain.  No están controladas ni reguladas por ninguna institución y no requiere de intermediarios para realizar transacciones.

Se usa la base de datos descentralizada, Blockchain o un registro contable para estas transacciones. No son consideradas como un medio de pago y no cuentan como el respaldo de un banco central o de autoridades públicas por lo que no están cubiertas por mecanismos de protección al cliente como El Fondo de Garantía de Depósitos o Fondo de Garantía de Inversores, explica la página del Banco Santander.

Lo central para entender este fenómeno monetario es su modelo basado en el Blockchain que permitió que esta fenómeno tecnológico y económico pueda llegar para todos los que tengan acceso a internet y recursos económicos. El blockchain o cadena de bloques es un registro distribuido, una base de datos que se almacena de forma virtual. Los usuarios que forman parte de está pueden actualizarlo de manera sincronizada, esto lleva a que cuando se quiere hacer una transacción o transferencias de criptoactivos de un usuario a otro debe ser autorizada por todos los usuarios. Cuando se compra o venden la moneda digital no se puede cancelar la operación porque el Blockchain es un registro que no permite borrar datos. Las monedas no están disponibles de forma física sino en lo que se llama un monedero digital de criptomonedas.

La seguridad de estas operaciones está dada por las operaciones criptográficas que provienen de algoritmos que codifican las operaciones. Para las transacciones se necesitan “de un mecanismo de consenso de parte de quienes participan. Dependiendo de la criptomoneda, su protocolo de consenso puede variar. Los más conocidos son dos: proof-of-work y proof-of-stake” explica Mariana Gutiérrez Magíster en Sociología y Licenciada en Administración por la UNC en diálogo con Pagina 12. El valor de una criptomoneda se determina por la relación que existe entre la oferta, la demanda y el compromiso de los usuarios, sin intervención de mecanismos de los mercados de valores.

Para poder comprar criptomonedas se debe realizar la transición en portales especializados. “Es importante tener en cuenta que los bitcoins -o cualquier otra criptomoneda- son instrumentos complejos, que pueden no ser adecuados para personas sin los conocimientos suficientes, y cuyo precio conlleva un alto componente especulativo que puede suponer incluso la pérdida total del dinero pagado para comprar las criptomonedas” advierte el banco Santander.

La relación que existe con el bitcoin con la economía real es que permite el uso de activos financieros para la especulación, ya que el modelo de descentralización financiera implica los que se llama como descentralización técnica, pero esto no implica la desconcentración de un poder económico.

Gutiérrez explica que “los poderes fácticos con grandes capitales tienen mayores facilidades de sacar provecho de una canasta de activos financieros tradicionales o alternativos. En el caso de los criptoactivos también hay un plus de rentabilidad para capitales concentrados que puedan lidiar con las innovaciones tecnológicas y aprovechar la escasa regulación. De más está decir que esa exacerbación de las finanzas hace aún más difícil la distribución del bienestar, la generación de empleo genuino y la reducción de las desigualdades socioeconómicas y culturales”.

¿Cuál es su utilidad y a quienes les conviene invertir en monedas digitales?

Es utilizado como una forma de inversión porque implica un altísimo riesgo de volatilidad y riesgo, esto significa que puede generar grandes ganancias si se quiere invertir a largo plazo. Es efectivo en países que tienen alta tasa de inflación porque funcionaria como una reserva de valor.

Según la Magister “nadie que quiera preservar sus ahorros se volcaría a bitcoin por la forma en que cambia su cotización día a día y con fluctuaciones ligadas a fenómenos de apariencia desopilante. Mucho menos personas que necesitan todos sus ingresos para alimentarse y pagar servicios. Por otro lado, no puede servir de “unidad de cuenta global”.

Hay que tener cuidado con plataformas y servidores que prometen grandes sumas de dinero por la adquisición de monedas digitales ya que muchas de ellas son engañosas y prometen el cripto como forma de ganar dinero fácil.