En su primera Cumbre del Mercosur, Macri habló sobre Venezuela en su objetivo de buscar un posicionamiento internacional. También puso énfasis en apurar el acuerdo con la Unión Europea y la Alianza del Pacífico.

Mauricio Macri consiguió su objetivo de no pasar inadvertido en su primera Cumbre del Mercosur. El presidente argentino reclamó la liberación de los que, a su entender, son “presos políticos” en Venezuela. En respuesta, la canciller venezolana Delcy Rodríguez lo acusó de interferir con la política interior de su país. También sostuvo que Macri había liberado en la Argentina a los responsables de delitos de lesa humanidad en la dictadura, cosa que no ocurrió. El presidente argentino agradeció a sus pares “por el tema Malvinas”, que fue incluido en el documento final. En lo económico, Macri puso énfasis en la Alianza del Pacífico y en el comercio con la Unión Europea.

Macri arribó en un jet alquilado a una complicada Asunción –justo ayer hubo una huelga general en Paraguay– para la primera cumbre de presidentes que le tocó afrontar en su mandato. Originalmente, tenía pensado reclamar que se le aplicara la cláusula democrática a Venezuela, pero luego de la elección en la que resultó vencedora la oposición venezolana el presidente cambió de idea. De todas formas, se trata de una herramienta que se utiliza cuando en un país se interrumpe el orden constitucional, por lo que era una jugada difícil, aun entre sus socios regionales más amigables.

Sin embargo, el presidente argentino está decidido a dar un giro de 180 grados en la relación entre la Argentina y Venezuela como forma de posicionarse internacionalmente, principalmente un gesto hacia la Casa Blanca. Ayer lo probó ante los otros presidentes, menos –justamente– Nicolás Maduro, quien a último momento decidió no asistir a la 49ª cumbre de jefes y jefas de Estado. Estuvieron, en cambio, la presidenta brasileña Dilma Rousseff, el uruguayo Tabaré Vázquez, la chilena Michelle Bachelet, el boliviano Evo Morales y Horacio Cartes, que fue el anfitrión del encuentro, en el Centro de Convenciones de la Conmebol.

“Soy muy optimista sobre el futuro de nuestro bloque al que veo lleno de oportunidades, y como un espacio para fortalecer las relaciones económicas y comerciales entre nosotros y con todo el mundo, para ayudarnos a crecer y reducir la desigualdad en la región”, dijo Macri, el primero en hablar. “No hemos hecho lo suficiente. Es tiempo de apretar el acelerador y avanzar en los acuerdos entre la Unión Europea y el Mercosur”, indicó.

Ahí llegó el punto de la polémica: Macri reclamó “expresamente por la pronta liberación de los presos políticos en Venezuela, porque en los Estados parte del Mercosur no puede haber lugar para presos por razones ideológicas ni la privación ilegítima de la libertad”. “Así como quisiera aprovechar para pedir prudencia a la oposición después de los comicios, también quiero pedirle al gobierno venezolano que trabajemos incansablemente para lograr una verdadera cultura democrática en la región que incluya a todos”, indicó. “Llegó la hora de pedirle un poco más a la democracia: en el siglo XX superamos las dictadura y les dijimos ‘nunca más’ a los gobiernos militares, el siglo XXI nos exige audacia y compromiso por una democracia más participativa e inclusiva”, afirmó.

Lo escuchaba la canciller venezolana Delcy Rodríguez, quien no perdió oportunidad para responderle. “Tengo que responderle al presidente Macri porque usted se refirió a Venezuela. Hablo en nombre de Nicolás Maduro y le digo que usted está haciendo injerencismo sobre los asuntos de Venezuela”, afirmó. Rodríguez mostró fotos de una manifestación que impulsó Leopoldo López el 14 de febrero de 2014, y en la que murieron más de 40 personas. “Usted está defendiendo a esta persona. Está defendiendo este tipo de manifestación, esta violencia política”, le espetó a Macri, mientras le señalaba fotos de “ataques con bazookas”.

Derechos humanos

“Si vamos a hablar de derechos humanos de forma pacífica, como pidió Macri, tenemos que hacerlo sin doble moral. No podemos defender a los violentos causantes de acciones terroristas y criminalizar las protestas sociales”, afirmó la canciller venezolana. “Venezuela hoy es ejemplo de derechos humanos en el mundo, no existe hoy en otro país la cantidad de programas sociales que tiene hoy la Nación”, sostuvo. “Sabemos que usted ha vetado leyes contra el trato injusto, la tortura, las desapariciones forzadas. Recientemente hemos visto con sorpresa como se imputaba a la querida Hebe de Bonafini”, afirmó la canciller.

“Yo entiendo que el presidente Macri quiera pedir la libertad para estos violentos. Lo entiendo porque uno de sus primeros anuncios fue el de liberar a los responsables de las torturas, desapariciones y asesinatos durante la dictadura en Argentina”, sorprendió Rodríguez.

Macri no respondió. La encargada de contestarle fue la canciller argentina Susana Malcorra, quien dijo que el mandatario argentino “escuchó con preocupación por la desinformación del contenido de la respuesta; por lo demás, él escucha a todos y sigue adelante”. “Se niega todo lo que ha dicho con respecto a decretos que atentan contra la libertad y los derechos humanos: no es así y el Presidente decidió que no es necesaria una respuesta”, indicó.

Malcorra indicó que “ha habido énfasis importante en lo que hace a derechos humanos, y se firmó una declaración específica con la que trabajaremos en conjunto para fijar un mecanismo de revisión de los derechos humanos dentro de la región”.

En la declaración final de la cumbre, los jefes de Estado se congratularon por la adopción del Protocolo de Derechos Humanos en el Mercosur –que cumplió 10 años– y expresaron “preocupación por las crisis humanitarias que afectan a migrantes de Siria, Eritrea, Afganistán, Somalía y Nigeria, quienes han puesto en riesgo sus vidas al escapar de situaciones de violencia, la miseria y el hambre”. También indicaron su respaldo al “derecho del pueblo palestino a conformar un Estado en base a las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como su capital”, y que sea capaz de “vivir en paz y seguridad con Israel”.

Malvinas

En su discurso, Macri también agradeció “por el tema Malvinas”, en referencia a la inclusión que se hizo, como otras veces, del reclamo de la Argentina por la soberanía de las islas. “Los presidentes y presidentas del Mercosur y estados asociados, en conocimiento de la presencia de una plataforma semisumergible en la plataforma continental argentina que realiza actividades de exploración hidrocaburífera no autorizadas por la República Argentina rechazan firmemente esta nueva acción unilateral del Reino Unido violatoria del derecho internacional y las normas internas de Argentina”, señala la declaración final de la Cumbre.

Apenas concluía la reunión y tomada la foto de familia, Macri se volvió a Buenos Aires para hacer el anuncio de los 400 pesos extra para quienes cobren la AUH. Se fue y volvió en un jet privado porque no quiere usar el Tango 01, que necesita una revisión general debido a sus años de uso, por lo que habría decidido comprar uno nuevo. En la comitiva lo acompañaron el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, y el nuevo titular de Yacyretá, Humberto Schiavoni.

Fuente: Página 12