La asesora jurídica del Foro de Mujeres, Mónica Menini, habló con Cuarto Poder y repasó algunos de los femicidios con mayor incidencia en la provincia. Nueve casos atravesados por un horror que la Justicia no sabe, no quiere o no puede resolver. (Stephanie Tiemersma)
1.- Juana es la niña wichí de 12 años con retraso madurativo violada por un grupo de criollos en Alto de la Sierra. Diversos organismos del Estado no interrumpieron el embarazo hasta que fue sometida a una cesárea porque el feto era anencefálico. Se solicitó un jury de Enjuiciamiento al juez Héctor Astigueta y al fiscal Armando Cazón, encargados del caso, pero este fue desestimado. Un jury de enjuiciamiento es un órgano conformado por representantes de los tres Poderes que determinan si el funcionario acusado cumplió correctamente los deberes que le manda su cargo.
“Este caso es emblemático en la falta de investigación de la fiscalía. Lo que llevó a un ministro de la corte a solicitar el juicio político de un fiscal. Realmente es impresionante la serie de justificaciones que hay en nuestra provincia para la no-investigación, la omisión, la investigación tardía, desviada”, nos relata Menini.
En este mismo caso, el Cuerpo de Investigaciones Fiscales, trajo al proceso un dato que nunca fue corroborado pero que obstaculizó la investigación. El aborto terapéutico de la nena, debido a las malformaciones en el embarazo, se hizo a los seis meses de gestación. Aprovechando esto, el CIF cambió la fecha de la semana de la posible concepción de modo que no coincida con la fecha en la que se denunció la violación.
“Eso entorpeció el proceso y no llevó a absolutamente nada, no hay ninguna pista que determine que Juana fue violada con anterioridad al día de la denuncia. El hospital confirmó cuatro veces la fecha de concepción y esta coincidía con el día en el que la niña había sido abusada. Pasan los meses y las pruebas se pierden. En un abuso sexual, por ejemplo, se pierden en muy poco tiempo. Si nos enteramos siete meses después imagínate. Pero, el fiscal siempre se entera en el momento”, afirma la letrada.
2.- Otro caso citado por la abogada es el de Marcela Mamaní, la joven que desapareció el 16 de febrero de 2012. Esta mujer estaba en pareja con José Aramayo quien la había agredido en varias oportunidades y existían denuncias al respecto. El caso conmociono porque se llegó a la sentencia de Aramayo a 16 años de cárcel por homicidio sin tener el cuerpo de la víctima.
“La madre de Marcela Mamaní, murió sin saber qué había sucedido y también tenemos sospechas respecto a si el que está preso verdaderamente fue o no el culpable. Además la carátula es homicidio, no femicidio como debería ser”, comenta Mónica.
Menini nos cuenta que, en los casos de violencia de género, muchas veces la policía no toma la denuncia de desaparición y que una de las razones es que no cuenta con un protocolo de asistencia integral a las víctimas de violencia. “Estas mujeres van a pedido de los fiscales a ampliar una denuncia porque la policía no les hizo las preguntas que tenía que hacer. Y la escritura en estos procesos es fundamental. Es muy importante esa entrevista que le hace el policía, la víctima es una persona que cuenta lo que le pasó por primera vez y nadie le da las pautas de qué información debe dar”, resalta la abogada.
3.- Otro caso del que se ocupó nuestra entrevistada fue el de Yolanda Mamaní, una joven estudiante de Historia de la Universidad Nacional de Salta que el 25 de junio de 2015 salió en llamas de su casa y fue auxiliada por una vecina. La joven agonizó once días en el Hospital San Bernardo y luego murió. Los únicos que estaban presentes el día del hecho eran el novio de Yolanda y un niño de dos años. “El CIF cerró la causa como un accidente, a ella le gustaba jugar con alcohol y fuego y por eso se quemó, parece” recuerda la asesora jurídica del Foro de Mujeres.
4 y 5.- Mónica también nos habla del caso de una mujer de Salvador Mazza que estaba embarazada y que era constantemente golpeada por su marido. El bebé murió antes de nacer y generó una infección que mató a la madre. Pero no se consideró un femicidio “La investigación respecto a si el embarazo pudo haberse truncado a causa de los golpes no se hizo. La defensora en violencia de género en Tartagal pidió cuatro veces que haya autopsia y nunca se la aceptaron”. Otro caso sobre el que nos comenta, es el de una joven que se embriagó junto con su pareja y que luego fue agredida hasta morir. Los vecinos escucharon los gritos, sin embargo el CIF dijo que la víctima murió broncoaspirada porque estaba excedida de alcohol.
6 y 7.- La raíz de los conflictos, según Mónica, es la ausencia de un protocolo de investigación fiscal con perspectiva de femicidio o de trata de personas: “No es una idea nuestra, esto se implementó en México y cambió la historia de Ciudad Juárez. Lo mismo con la perspectiva de trata”.
Nos cuenta que cuando una persona desaparece no se investiga automáticamente la posibilidad de que haya habido trata de personas ya que este es un delito federal. Un ejemplo es el de María Cash, la diseñadora porteña que fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 por cámaras de seguridad cercanas a la autopista de acceso-egreso de la capital salteña. Se tardó tres meses en pasar de la justicia provincial a la federal. Otro caso conocido es el de Paola Álvarez, desaparecida el 5 de mayo de este año y vista por última vez por las cámaras de seguridad de la zona cuando entró a la casa de Santiago Zambrani, un amigo. “Hay muchos casos de desaparición que nunca pasaron a la justicia federal. El caso de Paola Álvarez sigue en la justicia provincial, cuando es probable que haya una situación de trata a investigar”, reflexiona nuestra entrevistada.
Según el código procesal penal la investigación del hecho criminal debe hacerse alrededor de un par de días antes y un par de días después de cometido el delito. Pero el femicidio no es igual a otros crímenes: Empieza como un círculo vicioso que pasa de la luna de miel, a la tensión y luego al golpe para repetirse constantemente cada vez con más violencia hasta que se llega a la muerte. Mónica nos explica que, conociendo la mecánica del hecho, la investigación no puede centrarse en unos pocos días antes y después del crimen. Para ver si esta espiral se presenta y se repite se requiere observar lapsos más largos de tiempo. Eso se logra con un protocolo de investigación fiscal que contemple esta perspectiva.
8 y 9.- Menini también plantea su opinión respecto a la arbitrariedad de la justicia: “Entiendo que hay que hacer todo para encontrar a las víctimas, pero ¿por qué en algunos casos se da recompensa y en otros no? No estoy en contra de que se recompense a quien aporte a la resolución del crimen, pero sí me parece que esto debería repetirse en todos los casos”.
Para dar un ejemplo, Mónica habla de los casos de Jimena Salas y de Cintia Fernández. La primera fue asesinada con numerosas puñaladas en Vaqueros el 27 de enero de este año. El gobierno decidió dar una recompensa al que aporte datos sobre el asesino aún prófugo. La segunda fue encontrada por su madre, Ana, el 3 de mayo de 2011 en un dormitorio del departamento de la víctima. Había sido asesinada cinco días antes. Se sospecha que la joven fue asfixiada con una bolsa que le colocaron en la cabeza. En este caso el gobierno no ofreció nada a cambio de que se aportaran datos a la investigación.
Respecto al silencio de los fiscales, Mónica afirma que respeta el secreto de sumario porque hay información que si es revelada puede entorpecer la investigación. Pero en relación a la falta de presupuesto para los distintos casos, Menini opina totalmente lo contrario: “Los presupuestos que le entregaron a la justicia y al ministerio público fueron importantes estos últimos años. Hay que pedir los papeles que muestren la cantidad de plata que se invierte en la creación de nuevas instituciones ¿Cuánto cuesta el CIF? ¿Cuánto cuesta crear juzgados, defensorías, fiscalías de estado, observatorios? Sin embargo, no tenemos buenos resultados. Entonces quieren más dinero a ver si así logramos algo. Hubo mucho aporte en lo que significó la emergencia de género ¿Dónde está todo eso en los índices? Cada vez hay más femicidios. No es sólo plata, falta algo más. Acá todos se mueven solo con los gritos de la gente” sentencia la abogada.
