Una auditoría sobre el período 2013 del Hospital San Vicente de Paul, de Orán, publicada en la última semana, revela la frágil situación que vive el lugar y el riesgo al que se exponen sus pacientes. La precariedad de uno de los centros sanitarios más importantes de la provincia. (Jorge Nitales)

De movida, no se pudo investigar correctamente. Es uno de los primeros conceptos que se pueden leer en el reciente informe presentado por la Auditoría General de la Provincia que evalúa el período 2013 del Hospital San Vicente de Paul, de Orán. Allí se lee que hubo faltantes de información de distintas dependencias de ese instituto sanitario, uno de los más importantes de Salta.

“La administración del Hospital no puso a disposición ninguna documentación que permita el análisis sobre la gestión de las unidades habitacionales destinadas al personal médico. Se constató que el Sistema de Control Interno no está formalmente establecido, sólo se han dispuesto medidas aisladas”, expresa el informe, publicado hace pocos días en la web de la Auditoría (agpsalta.gov.ar). De allí en más, la lista de faltantes y de incumplimientos en el hospital se extiende, describiendo distintas falencias.

La evaluación de la gestión sanitaria se efectuó analizando las características de los  principales componentes que inciden sobre la prestación médica, como la infraestructura edilicia, los servicios generales y los servicios médicos hospitalarios.

Da para más

El Hospital San Vicente de Paul integra la Red de Atención Orán, componente de la Región Sanitaria Norte. Su grado de complejidad es de Nivel IV. En tanto, de acuerdo a la  normativa del Ministerio de Salud Pública de la Nación, el grado de complejidad corresponde al Nivel III de Atención. El edificio fue inaugurado en 1981. Se efectuaron modificaciones desde entonces y otras se encuentran en curso de ejecución: remodelaciones en el sector original de Emergencias y ampliaciones en el ala este.  Está conformado por un subsuelo, planta baja, primero y segundo piso.

“De acuerdo a lo informado por el Programa de Fiscalización y Control de Calidad de los Servicios de Salud – Dirección General de Infraestructura, dependiente del  Ministerio de Salud Pública, el Hospital no cuenta con Habilitación Categorizante. No obstante esta situación, se encuentra en funcionamiento, inobservando lo establecido en el Apartado Habilitaciones del Decreto 1979/96 – Programa de Habilitación, Acreditación y Categorización de Establecimientos Asistenciales”, expresa el informe en una de sus primeras observaciones.

Luego agrega que el edificio principal y sus ampliaciones efectuadas “no disponen de planos de estructura sismorresistente, visados por del Consejo Profesional de Agrimensores, Ingenieros y Profesiones  Afines, contraviniendo la Ley No5556”.

El Nivel IV fue puesto en duda durante la investigación, ya que se constató que los requerimientos  establecidos no se cumplen.  El hospital no cuenta con Medicina nuclear, Estudios Neuro y/o Angioradiológicas ni Tomografía, servicios de Alta Complejidad necesarios. El edificio no tiene rampas. El traslado del material esterilizado a las áreas críticas, no dispone vías de circulación  diferenciadas.

Una lista increíble

A continuación, las observaciones realizadas por el informe. Resultan tantas que abruman. Y algunas de ellas realmente demuestran el peligro que existe, latente.

El Servicio de Enfermería está tan mal instalado que su localización inhabilita el uso de un sector de ascensores, no dispone de sala propia de reuniones. No cuentan con Sanitarios para el personal en los servicios de Neonatología, Esterilización, Consultorio Externo y Plan Nacer. No disponen de Vestuarios para el personal en los servicios de Especialidades Médicas, Cirugía, Tocoginecología, Sala de Partos, Quirófano y UTI. No cuentan con Depósito para materiales y equipos en los servicios de Clínica Médica, Especialidades Médicas, Pediatría, UTI Pediátrica, Cirugía, Tocoginecología, Emergencias, Esterilización, Consultorios Externos y Plan Nacer.

Tampoco dispone de sectores diferenciados para la gestión de los residuos y disposición de ropa usada, en los servicios de UTI Pediátrica, Neonatología, Sala de Partos, Emergencias,  Esterilización, Consultorio externo y Plan Nacer.

El Servicio de Esterilización, ubicado en planta baja, no conforma una unidad con el Centro Quirúrgico, localizado en el primer piso. No dispone de vías diferenciadas, para el traslado del material esterilizado hacia los servicios críticos localizados en el primero y segundo piso del edificio. El equipo de climatización disponible no cubre las necesidades del Servicio. No cuenta con Sanitario ni Vestuario para el Personal.  El esterilizador a vapor seco no funciona por falta de trabas de cierre en la puerta. No dispone de barreras de seguridad que controle el acceso restringido a personas ajenas al  Servicio.

Los Servicios del Laboratorio Bioquímico y Bacteriológico, que conforman el Laboratorio  Central no cuentan con Habilitación del Colegio de Bioquímicos de Salta.  La accesibilidad al Servicio de los sectores de internación, dispuestos en altura, no cuenta con vías diferenciadas de acceso al Laboratorio ni cuenta con Sala de Espera.

Los Consultorios de Clínica Médica, Neonatología, Pediatría, Fonoaudiología y Oftalmología, no disponen de iluminación ni ventilación natural adecuada. De un total de 25 Consultorios, ocho no disponen de equipos de climatización.

El Servicio de Cirugía no tiene Sala de Pre anestesia. Su sistema de ventilación no cumple con las condiciones de asepsia inherentes al tipo y nivel de riesgo de la intervención. No dispone de sector de estacionamiento transitorio de camillas y/o silla de ruedas, ni intercambio de camillas.

En el Servicio de Farmacia, el Depósito de medicamentos es compartido con elementos de Laboratorio y Odontología. La ventilación e iluminación natural no cubre los requerimientos y se observa en paredes, rasgos de humedad. Dispone de una sola vía acceso y egreso. El Servicio de Farmacia tampoco dispone de información clasificada por mes de la cantidad de  medicamentos vencidos  que se entrega a la transportista para su disposición final.

El Servicio de Internación no dispone de salas de espera. La Estación de Enfermería, Abastecimiento y Procesamientos Periféricos Usados no procesa los elementos usados. No dispone de depósito para el almacenamiento de los residuos comunes y biopatogénicos.

El Servicio de Guardia de Emergencias no dispone de Sala de Espera, Consultorios Médicos por Especialidad, Sala de Shock Trauma para recepción del politraumatizado, ni Quirófano para control de daño. En las mesas de cirugía no funcionan los sistemas de movilización para acomodar al paciente. El equipo de Laparoscopía se encuentra fuera de servicio por rotura de fibra óptica.

El inventario del equipamiento médico quirúrgico provisto, se encuentra desactualizado. La última actualización data de diciembre de 2008.

El sector de Lavandería no dispone de vías de comunicación diferenciadas para el ingreso y egreso de sucios y limpios. El Personal no dispone de indumentaria (botas de goma y delantal) para el desarrollo de sus  funciones, ni de elementos de protección auditiva, que mitiguen los ruidos emitidos por el  funcionamiento de los equipos del sector.

En el sector de Cocina, dependiente del Programa de Nutrición, la Despensa o Depósito de Víveres, no dispone de iluminación y ventilación adecuadas.

Respecto a la planta física, el hospital no dispone de una Base de Operaciones con  infraestructura edilicia, aprobada por autoridad competente. Ninguna unidad de traslado cuenta con el informe de su estado mecánico. Las ambulancias de alta complejidad, disponen parcialmente del equipamiento básico de diagnóstico y de asistencia exigidas por la normativa citada.

El Hospital no dispone de un local exclusivo para el depósito transitorio de los residuos  biopatogénicos generados. Se depositan en contenedores específicos, provistos por la empresa  DGM S.R.L., dispuestos inadecuadamente en el acceso a la Sala de Máquinas, sin delimitación  ni restricción alguna.

Los residuos líquidos diluyentes y corrosivos provenientes de la actividad radiológica, farmacéutica y de laboratorio, se eliminan vía desagües cloacales, sin tratamiento previo,  inobservando lo establecido por la Ley de Protección del Medio Ambiental.

No se cumplen los protocolos de bioseguridad, en los procedimientos quirúrgicos y en el transporte del material esterilizado desde el sector correspondiente, por cuánto no se disponen de vías diferenciadas de traslado.

El plantel médico profesional resulta insuficiente, tanto en el sector de Cirugía, por la falta de anestesistas, como en las áreas de Neonatología y Pediatría.

El informe, de más de sesenta páginas, es contundente. A veces no hace falta ser experto para sacar conclusiones.