Ante las preguntas relacionadas con la situación que vive Orán, donde la mitad de sus habitantes prefiere tomarse el palo antes que quedarse, el ministro de seguridad Sylvester opina que son exageraciones típicas de la época de campaña por parte de los medios y candidatos.
A veces parece que hay un universo paralelo imaginario dentro de la mente de algunos funcionarios que desconocen lo que sucede o se hacen los giles porque les conviene.
En una entrevista para videotar el ministro realizó un somero análisis de la situación actual de Orán. Como quien dice lo que ya todos sabemos, la culpa es siempre de los otros: “además de un problema estrictamente de seguridad con la intervención policial que lo pueda resolver, hay una problemática social de fondo, que es lo que genera esta situación, con algún componente político también, con alguna situación vinculada al control de la frontera que le compete a la nación, en fin, es una serie de factores que confluyen y para dar una solución realmente efectiva habría que hacerlo de modo integral.”
Respecto al constante reclamo de los vecinos, Sylvester consideró que es todo parte de una gran exageración ya que “esas visiones apocalípticas que se dan lejos de ayudar a solucionar los problemas lo que hacen es provocar una agitación que no tiene ningún resultado positivo, lo que hay que hacer es ponerse a trabajar”. Hasta ahora el trabajo parece que no dio muchos resultados, si es que se considera que la mitad de los oranenses se quieren ir a vivir a otro lado .
“En épocas electorales aparecen los críticos que durante todos los años que fueron funcionarios públicos estaban, no sé… viajando por el mundo y ahora se dan cuenta que hay un problema de seguridad”, remató el ministro, esquivando la bala.