El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) le advirtió a la titular de la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, Miriam Lewin, que la creación del Observatorio de la Desinformación y la Violencia Simbólica (NODIO) implica un riesgo claro para la libertad de expresión y la pluralidad de voces en el país.
Frente al anuncio de su creación, FOPEA inmediatamente pidió una audiencia con las autoridades de la Defensoría para poder escuchar de primera mano las características de la iniciativa y expresar su opinión al respecto. Según las autoridades del organismo, NODIO fue pensado para trabajar “en la detección, verificación, identificación y desarticulación de las estrategias argumentativas de noticias maliciosas y la identificación de sus operaciones de difusión”. Para FOPEA esta definición tiene una peligrosa ambigüedad que puede ser usada para afectar la diversidad de expresiones periodísticas. «De acuerdo con varios de los comentarios de la mayoría de los participantes en el panel de presentación realizado el pasado viernes 9 de octubre, el observatorio sería una forma de combatir los discursos del odio que provienen de las “derechas” “neoliberales” “capitalistas”, lo que le da una orientación ideológica a una institución que es estatal y no gubernamental, como es la Defensoría del Público».
Con la excepción de Adriana Amado y las consideraciones legales de Damián Loretti, el resto de los panelistas enmarcaron sus comentarios en esta visión ideológica definida. «Si este marco político fue el elegido para lanzar esta iniciativa, es evidente que estamos frente a un observatorio de orientación militante, lo que contradice los objetivos de la Defensoría», explican las autoridades de FOPEA.
Lewin expresó que el Observatorio “no va a estar dirigido a estigmatizar a ningún periodista ni medio”. Pero, más allá de las intenciones expresadas, FOPEA considera que hay un serio riesgo de que esta iniciativa sea utilizada para promover una narrativa estigmatizante contra medios y periodistas críticos.
Desde sus orígenes, FOPEA fomenta el análisis crítico del periodismo a nivel federal, el que está sometido al escrutinio de la sociedad y que debe apuntar con profesionalismo hacia la calidad informativa. Sin embargo, «observatorios de esta naturaleza pueden ser utilizados como instrumentos de facción para señalar a medios y periodistas por sus opiniones y por sus trabajos, desencadenando una nueva forma de censura y de persecución hacia la prensa», afirma FOPEA. «La desinformación y los discursos violentos, se combaten con una jerarquización del periodismo profesional y una cada vez más sostenida libertad de expresión», finalizó el comunicado.