Gabriel Pérez había sido echado de la fuerza por una denuncia de amenazas, pero la justicia lo sobreseyó.

Un expolicía de la provincia se encuentra en huelga de hambre en el ingreso al edificio del ministerio de Seguridad. Exige ser reincorporado a la fuerza.

Gabriel Pérez fue destituido en 2017 luego de que su expareja lo denunciara por amenazas. El caso llegó a la justicia y fue sobreseído en primera instancia, sentencia que luego quedó firme.

Una semana antes del fallo, el área de asuntos internos de la secretaría de Seguridad emitió una resolución que lo dejaba cesante. Desde entonces, intenta sin éxito ser atendido por autoridades del ministerio.

Desde la jornada de ayer por la noche se encuentra en huelga de hambre y asegura que permanecerá en el lugar hasta ser atendido por el ministro Cornejo.