El gobierno finalmente concretó su proyecto policial para Salta. Se frenará el ingreso a la policía. La cantidad incorporada de efectivos es “suficiente”. Lo confirmó el ministro de Seguridad cuando dijo que “la medida corresponde a que cumplieron con el objetivo planteado a inicios de año”.

Se va a reducir drásticamente el cupo de ingreso a la institución azul, ante la gran cantidad de efectivos policiales que tiene la provincia. La reducción será desde 2015 y quedará acotada solo a las bajas que se registren.

Los motivos para tomar esta determinación son económicos. Hoy se pagan tantos sueldos que no se puede invertir en la logística, necesaria para “semerenda” tropa U.

La gestión alcanzó los 11 mil efectivos en toda la provincia. La suma dista bastante de los 7500 policías que dejó la administración Romero.

En 2007 cuando comenzó el gobierno de “el cambio”, el ingreso a la policía estaba reducido entre un pequeño grupo, equivalente al doble de las bajas registradas.

Hasta el ingreso U al poder también se cambiaba anualmente el jefe de policía. Era una forma de oxigenar el mando de una institución tan verticalista.

El notorio ingreso de efectivos (lo cual no significa mayor seguridad) se registró en los últimos cuatro años, y fue producto de una planificación realizada, e implementada, por Pablo Kosiner y Aldo Saravia, a cargo del Ministerio y la Secretaría de Seguridad de Salta.

Desde entonces el ingreso a la institución policial multiplicó la población uniformada.

El actual ministro explicó que con la reducción del ingreso se podrán destinar fondos a mejorar el equipamiento en las comisarías y sub comisarías.

Como era de esperar el funcionario aclaró que esta medida no pondrá en peligro la presencia de policías en la calle y confirmó lo denunciado tantas veces: “la provincia se encuentra entre las que más recursos humanos tiene en todo el país”. Salta, un Estado policial…