Alfonso Prat Gay anunció que subirá el mínimo imponible de Ganancias entre un 15 y un 17%. Busca satisfacer en parte a los sindicatos pero afecta la coparticipación a los gobernadores, quienes buscarán que Nación ponga la diferencia.

Algunos portales nacionales ya anuncian el dilema con el que se enfrentan los gobernadores. Y es que por un lado la medida anunciada por Prat Gay busca aminorar el reclamo de los sindicatos pero la medida disminuye un poco más los montos de coparticipación que ya vienen sufriendo bajas por la eliminación de retenciones o cuando se bajó el IVA a los alimentos para jubilados y beneficiarios de planes sociales.

Ante ello, anunció La Política Online, los mandatarios ya evalúan una estrategia para no quedar enfrentados a los sindicatos: junto a sus legisladores evalúan exigir que cualquier cambio en Ganancias sea financiado por el porcentaje de impuestos retenido por Nación.

El debate ya tuvo un episodio e involucró al salteño Pablo Kosiner cuando se bajó el IVA a alimentos para jubilados y beneficiarios de planes sociales: un dictamen del diputado salteño contemplaba una partida nacional para afrontarlo, pero no prosperó. También lo exigió Adolfo Rodríguez Saá en el Senado, con la amenaza de elevar el reclamo a la Corte Suprema. “No se puede reducir coparticipación sin un acuerdo marco Nación-Provincias”, argumentó. Pero no fue tenido en cuenta.

El planteo volverá a escucharse cuando Prat Gay envíe la modificación de Ganancias, que hoy grava a solteros con salarios de 18800 pesos y casados con 25 mil. Los cambios contemplarían una reducción de las escalas, con bajas de alícuotas para las categorías más bajas, las más defendidas por los sindicalistas.

Es que los gobernadores fueron golpeados por la recesión, que impactó sobre su recaudación de ingresos brutos; y las bajas de IVA, Ganancias y del 5% de la retención a la exportación de soja, coparticipables desde 2009.