Por cuarto año consecutivo mujeres trabajadoras, amas de casa, desempleadas, profesionales, estudiantes de secundario y el colectivo LGBT se manifestaron por las calles de Salta para gritar ¡Vivas nos queremos!. En un brutal contexto de ajuste, dijeron “No al FMI” y repudiaron los intentos de intromisión de la iglesia católica en el pedido por el aborto legal. Fotos
Con gran presencia de estudiantes secundarios conformados en la Coordinadora de Estudiantes de Salta, y con gran cantidad de alumnxs del Centro de Estudiantes del IEM, ayer se realizó por cuarto año consecutivo la marcha nacional Ni Una Menos. La misma tuvo réplicas en ciudades del todo el país y a solo días de que el Congreso debate la ley sobre despenalización y legalización del aborto, la convocatoria fue una vez más masiva en todo el país.
En Salta ni el frío logró que mujeres de distintas organizaciones dijeran presentes en las calles céntricas. Las consignas fueron muy claras y en el acto de cierre se pudo observar cual es el posicionamiento que tiene el movimiento de mujeres salteño frente al panorama político nacional y local. Este año la marcha repudió las medidas de ajuste y el acuerdo que lleva adelante el gobierno macrista con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El repudio se reflejó en diversos carteles y a diferencia de año anteriores esta vez no hubo presencia de funcionarios ni diputadxs. Todxs brillaron por su ausencia.
«Ante un contexto brutal de quita de derechos, de ajuste, despidos, represión, tarifazos, impuesta por el Gobierno nacional, y suscripta por el gobernador Urtubey y la mayoría de los intendentes de Salta, que afecta a los más pobres, trabajadores, jubilados, especialmente a niñas y mujeres; porque no queremos ni una muerta más por abortos clandestinos, convencidas que la deuda es con las mujeres, lesbianas, bisexuales, trans y travestis salimos a la calle una vez más para gritar las consignas que nos unen», señaló una de las manifestantes.
La marcha que comenzó en la Plaza 9 de Julio, pasó frente de la Legislatura donde un pequeño grupo de salteños montó una carpa en la que se resguarda una imagen de la virgen María. Allí, las organizaciones que rechazan la legalización del aborto, manifiestan su postura rezando las 24 horas. Las manifestantes en cambio lograron dejar un cartel en la vereda que decía: Aborto legal.
En el acto de cierre las presentes aprovecharon para agradecer la participación de lxs estudiantes secundarios: “Gracias por estar, ustedes son el futuro”, les dijo una de las mujeres marchantes. Una de las alumnas del IEM también tomó el micrófono, allí demostró que lxs jóvenes están cada vez más comprometidos y sensibilizados por las problemáticas sociales y políticas. Exigió fuertemente la necesidad de tener en las aulas Educación Sexual Integral.
En la ocasión las mujeres también reflejaron su rechazo a las medidas demagógicas del gobernador Urtubey y rechazaron la intromisión de la iglesia católica en el debate sobre el aborto legal. Repudiaron asimismo que los diputados se hayan levantado de la sesión el martes pasado cuando se debatía un proyecto de ley que busca que Salta se adhiera al protocolo nacional de salud de aborto no punibles. Describieron que pese a eso estarán hoy frente a la legislatura y mañana en el concejo deliberante ante el intento de los ediles de manifestarse a favor de los abortos clandestinos.
Genealogía del movimiento Ni Una Menos
La iniciativa de la movilización que se realizó un 3 de junio de 2015, se inició en Twitter tras el hallazgo del cuerpo de Chiara Paz, una nena de 14 años asesinada por su novio de 16; el cadáver fue enterrado en una casa de la población de Rufino, provincia de Santa Fe. Chiara fue denunciada como desaparecida desde hacía unos días, estaba embarazada y esa situación habría desencadenado el crimen. Aunque el novio confesó ser el autor material, la Justicia evaluaba si sus familiares participaron. “Está corroborado” que el asesinato se cometió “en un contexto abortivo”, declaró el fiscal Alejandro Sinópoli.
Con el caso de Chiara en la tapa de los diarios, mientras noticieros televisivos y radiales realizaban la cobertura, la periodista y productora Marcela Ojeda escribió en su cuenta de twitter: “¿No vamos a levantar la voz? Nos están matando”, inmediatamente otras periodistas, actrices, escritoras y figuras públicas se sumaron y decidieron realizar un acto en el Congreso de la Nación. La convocatoria tuvo replicas en todo el país y se convirtió en una movilización nacional.
La periodista y directora de la revista Barcelona, Ingrid Beck, contó cómo surgió, por qué y cómo seguía la convocatoria : “La convocatoria #NiUnaMenos, que arrancó en Twitter tiene su origen en una maratón de lectura, una acción contra los femicidios nacida en Facebook, iniciativa de mujeres feministas. Entre las convocantes estaban María Moreno, Marta Dillon, Gabriela Cabezón Cámara, María Pía López y Selva Almada. Allí nos acompañaron madres y padres de víctimas, como los Taddei o los Chomnalez. Allí, el caso que motivó la acción fue el femicidio de Daiana García, asesinada y tirada en una bolsa de basura. Pusimos como fecha para el acto el 3/6 de manera arbitraria y pensando en que íbamos a necesitar tiempo para la difusión. Como habrán notado, la convocatoria nos pasó por encima, y se transformó en pública y masiva. Se sumaron famosos, artistas y dirigentes políticos. A los políticos queremos decirles que esto no termina en la foto con el cartelito”.