El problema tiene su origen en 2004, cuando los entonces intendentes de los tres municipios que componen el departamento Güemes, Campo Santo y El Bordo, establecieron la constitución de un consorcio que nunca llegó a funcionar como tal, y desde el 2016 solo sirvió para que las toneladas de basura de las tres comunas vertieran sin control

Lucas Sorrentino

Pesada herencia, lo que se llama pesada herencia, es la que recibió el intendente de General Güemes, Sergio Salvatierra:  un enorme basural a cielo abierto situado a solo 1.500 metros de la ciudad. Imaginen 14 shoppings Alto NOa juntos y ahora, en vez de ropa cara y comida chatarra, imaginen que hay basura. montañas de desperdicios y restos y mierda.

Esa es una pesada herencia de verdad. 

El origen -siempre es importante saber cómo empezó todo- fue el año 2004, cuando los intendentes de los tres municipios que componen el departamento Güemes, Campo Santo y El Bordo, establecieron la constitución de un consorcio que nunca llegó a funcionar como tal, y desde el 2016 solo sirvió para que las toneladas de basura de las tres comunas vertieran sin control, todo tipo de despojos. Lo que en principio parecía el gran proyecto por su envergadura, ya que logró financiamiento de nación, se escurrió. 

La gestión de Salvatierra intenta revertir esta situación, ya que es uno de los focos infecciosos más peligrosos que amenaza a la población local. Desde la Dirección de Medio Ambiente a cargo de la arquitecta Mirta González y la Dirección de Obras Públicas a cargo del ingeniero Carlos Matrichuk, empezó la recuperación del “Consorcio Valle del Sianca”, y en forma conjunta con los municipios de Campo Santo y El Bordo, recuperaron la Personería Jurídica, se realizaron los estudios de impacto ambiental, el proyecto de recuperación de las 32 trincheras, aperturas de caminos entre las toneladas de basura acumulada, paralelamente se trabajó para la expropiación de las 26 hectáreas que comprende el predio, lo que fue aprobado en la legislatura salteña por impulso del Diputado German Ralle, hoy es Ley N° 8.232.

Quizá no se vea, pero es una tarea fundamental

En el marco del proyecto nacional de recuperación y refuerzo a los vertederos el municipio de Gral. Güemes, para el servicio del consorcio recibió cinco modernas máquinas, entre ellas, una pala frontal, balanza, trituradora de vidrio, trituradora de elementos de poda, un punto verde, las que entrarán en función en muy breve tiempo una ves patentadas y capacitado el personal. 

Con esas máquinas, lo primero que hicieron fue acabar con el caos. Abrieron caminos internos para circulación y distribución de los residuos en forma ordenada, ya que se establecieron dos playas para residuos reciclables, una playa para escombros y una playa para recepción de residuos de podas. 

Ahora, las toneladas de escombros retirado de baldíos y zonas urbanas, por años abandonados, sirvieron sobre la margen del Río Mojotoro, como defensa para evitar las inundaciones anuales que se producían en el Paraje Torzalito.

También laburaron antes en capacitar a la gente que viene recuperando o reciclando, desde hace año en el vertedero, es el nuevo desafío con provincia y nación, para formar cooperativas que los contenga, para ello se alquiló un predio en el parque industrial que permitió instalar las maquinarias adquiridas y procesar lo reciclado junto a las treintas familias que escarban en el basural.

En Güemes además esperan que se haga realidad una promesa realizada el pasado año 2021 por el Ministro Juan Cabandie: el funcionario nacional visitó el predio y anunció la construcción de una Planta Procesadora de Residuos por el valor de $ 400 millones. 

Otro paso importante que se dio en Güemes: es el primer municipio de la provincia, en poner en marcha el reciclado de Aceite de Cocina, además del reciclado de neumáticos en desuso y plástico.    

La gestión de Salta Capital debería tomar nota de algunas cosas que se están haciendo en Güemes.