La trazabilidad proselitista llega este domingo a su primera estación, con una discusión que hasta acá quedó en suspenso. Reacondicionar el chip con el que vino operando el CPU provincial o echar mano a uno de reemplazo. De todas formas, con pronóstico incierto, más de un millón de salteños seleccionarán candidatos para la contienda central, la del Ejecutivo provincial. Por: Federico Pérez.

Una cuestión ordinal es la única duda que no se extingue con lo que los electores salteños definen este domingo, 6 de octubre ¿El resultado de las PASO será indicativo de un esbozo de provincia al que propenden los salteños o de la confusión ciudadana? Una vuelta de tuerca, también puede ser un planteo según el que dicha incertidumbre tal vez explique la ausencia de lo primero.

Es que, independientemente de los números con los que las pantallas del sistema del voto electrónico expresen, cerca de las 20 horas de esta gran noche electiva, el asunto central es sobre el chip ¿Habrá una senda para uno de repuesto o será el momento de reemplazarlo? Hasta el final de esta parte de la campaña, dos de los planteos con centralidad lo hicieron a vuelo rasante. Como dándole una chance al avión rubio, al cual Ícaro miraría de arriba.

La hipótesis de un triple empate técnico es un escenario que se baraja –y a la vez preocupa a varios analistas-, no sólo en el comando de Alfredo Olmedo, sino también en las mesas chicas de estrategas rivales. No sería un mérito del candidato a Gobernador por el alfredismo, más bien una consecuencia de la escasa puntería que se otea por el lado de Gustavo Sáenz como de Sergio Leavy. Si bien, hacia afuera de los dos últimos, se mantienen los respectivos mantras: Gana Leavy! Gana Sáenz!

El entusiasmo y el voluntarismo son condición necesaria en todo emprendimiento electoral, sin embargo no son condición suficiente. La sola reiteración de una arenga es un combustible de corto plazo, si no tiene como soporte un armado un tanto más complejo y general que guíe el accionar proselitista de conjunto. A la vez, cabe destacarlo, los mantras han sido en la última década el sello distintivo –por no decir, lo único- que ha impulsado el desenvolvimiento electoral del postulante amarillo.

Así, apelativos extraídos de lugares comunes o de viajes cortos en transporte impropio, aquello de “Vote sencillo”, “Probar trabajando”, “Con alegría”, “Por la Vida” le funcionaron para promocionarlo en comicios pretéritos en los que la expectativa estaba puesta en la mitad de tabla. En estas coordenadas que implican cierto riesgo se han venido desarrollando el trío de campañas que este fin de semana derivan en el primer filtro electoral, mientras la demanda social deberá aguardar al siguiente tramo.

 

 

La noche del domingo

La deuda electoral que queda impaga, la del chip mencionada al principio de este artículo, tal vez no pase a segundo plano cuando el domingo por la noche se den a conocer los resultados. Habrá que ver cuáles de los sectores que se asimilan protagonistas quedará mejor parado en sus respectivos planteos, cuál de ellos tiene margen de maniobrabilidad para corregirlo y cuál logra consolidar y/o profundizar en el rumbo trazado. Continuidad o alternancia, es la cuestión central.

En el acto que a mitad de semana protagonizó el precandidato Gustavo Sáenz, se planteó la construcción de una Provincia diferente a la de las últimas tres décadas, cual si fuese administrada por gestiones muy similares. Y que tienen como precedente a las que encabezaran Roberto Ulloa (1991-1995), Juan Carlos Romero (1995-2007) y Juan Manuel Urtubey (2007-2019). Pronunciamiento que conlleva su riesgo, a juzgar por el auditorio compuesto por actores y protagonistas de aquel viejo establishment que estuvieron en las primeras filas del escenario 360°, poblando el Centro de Convenciones de Limache ¿Estos son los escenarios que permiten dar la vuelta completa y morderse la cola?

De toda esta pléyade que anduvo por el CCL comenzaron a levantar apuestas, vinculadas al porcentaje de dirigentes y candidatos que el próximo viernes acompañarán a Mauricio Macri, quien vendrá a Salta para el capítulo gaucho de la marcha #SiSePuede. Al igual que en las demás 30 ciudades incluidas en el recorrido de este cronograma electoral para las presidenciales, MM intentará recuperar votos que le permitan arrimarse a los primeros lugares e ingresar a una eventual segunda vuelta presidencial.

El panorama que se le presenta es bastante complejo en la superficie gaucha. El pasado 11 de agosto, el binomio FF consiguió en Salta alrededor del 49 % de los votos, a 29 puntos de la fórmula Macri-Pichetto. Pero a este paisaje adverso, al que se suma una caída en la imagen presidencial, se le agregará el predicamento que entre el electorado local cuenta Juan Manuel Urtubey, el compañero de fórmula del economista Roberto Lavagna, en Consenso Federal 2030. Es decir, una porción bastante significativa de la concurrencia del miércoles a Limache que respalda a JMU.

 

 

Serena estaba la mar

A la expectativa de la marejada nacional, el Frente de Todos cerró este jueves en Salta con una gran caravana en la que participaron algunos de los candidatos a intendente, junto al precandidato a Gobernador, Sergio Leavy. Este sector espera que un nuevo aluvión de entusiasmo popular, el que teóricamente viene marchando, haga subir la espuma y el domingo 6 lo deposite en lugar expectable entre los que aspiran a la sucesión U.

Por algún motivo que sólo su comando de campaña sabe, en la tarea de diferenciación el FdeT dejó afuera de su mensaje a los últimos 12 años de gestión Urtubey, lo cual muchos relacionan el reciente paso de algunos de sus miembros en dicho gabinete. U otro nexo más fuerte. La cuestión es que su acompañante en el binomio principal, lo mismo que su comando de campaña, a cargo de Fernando Yarade y Alfredo Petrón, apunta en tal dirección. No es poco, pero es lo único que auxilia al deja vu.

Como decíamos, el FdeT eligió plantarse en el territorio gaucho con el rival designado -Sáenz- como emblema local del macrismo, en un planteo discutible, pero que en algún sentido resultó efectivo por lo que generó en el destinatario. Y es que, según todo indica, el alcalde capitalino eligió confrontar con el protagonista de la gran caravana de este jueves. Pero al hacerlo, descuidó el flanco de quien le compite por lonjas similares del electorado.

Alfredo Olmedo leyó este hueco mejor que nadie, y en la última parte de la campaña por las PASO develó que su preacuerdo con el aspirante por el Frente Sáenz Gobernador se partió, cuando su ex socio le exigió incluir en el diseño de gobierno un lugar para el mandatario saliente, JMU. Y, tal como expresamos al principio de esta nota, el vuelo rasante de los dos principales sectores le posibilitó al candidato amarillo empardarse, a bordo de su avión en tono áureo estridente, en un lugar impensable.