El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha confirmado que Argentina ha aprobado la octava revisión del acuerdo, lo que despeja el camino para el desembolso de 800 millones de dólares en junio. El organismo destacó que además «se han logrado acuerdos sobre políticas económicas para consolidar los logros alcanzados hasta la fecha».
En un comunicado, el FMI señaló: «Basándonos en resultados que superaron las expectativas, con todos los criterios de desempeño del primer trimestre cumplidos con creces, el personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han llegado a un entendimiento sobre las políticas a seguir para reforzar el proceso de desinflación, reconstruir las reservas internacionales, respaldar la recuperación y mantener firmemente encaminado el programa».
Este acuerdo está condicionado a la continua implementación de las medidas de política acordadas y a la aprobación por parte del Directorio Ejecutivo del FMI, el cual se espera que lo analice en las próximas semanas. Una vez finalizada la revisión, Argentina tendría acceso a desembolsos conforme al programa.
El organismo enfatizó que, además, «se han alcanzado acuerdos sobre políticas económicas para consolidar los logros alcanzados hasta la fecha».
Mencionó el gran progreso logrado hasta ahora, y también dijo que las políticas de las autoridades políticas seguirán evolucionando para garantizar la sostenibilidad del proceso de estabilización y reforma. Y que este contexto, se han llegado a acuerdos sobre políticas económicas para consolidar los logros alcanzados hasta la fecha, a como ser:
Política fiscal: El objetivo de lograr un equilibrio fiscal global sin financiamiento neto del banco central se mantiene inalterado. El programa continuará enfocado en mejorar la calidad y equidad de la consolidación fiscal, incluyendo reformas que mejoren la eficiencia y progresividad del sistema tributario, reduzcan los subsidios y refuercen tanto los controles del gasto como la rendición de cuentas. Al mismo tiempo, se seguirá fortaleciendo la asistencia social según sea necesario.
Política monetaria y cambiaria: La prioridad sigue siendo consolidar el proceso de desinflación y fortalecer las reservas internacionales y el balance del banco central. En la transición hacia un nuevo régimen monetario (que implica la competencia de monedas), la política monetaria evolucionará para seguir anclando las expectativas de inflación y la política cambiaria se volverá más flexible, al tiempo que se seguirán reduciendo las restricciones y controles cambiarios a medida que las condiciones lo permitan.
Política estructural: Se espera que las reformas microeconómicas en curso y cuidadosamente secuenciadas sirvan para respaldar la recuperación económica, así como para abordar los obstáculos a la productividad, la inversión privada y el empleo formal.
Modalidades del programa: Los objetivos y la condicionalidad del programa se han actualizado para reflejar los mejores desarrollos recientes y el nuevo panorama económico. También se están obteniendo garantías de financiamiento de los acreedores oficiales.
Finalmente, el equipo técnico del FMI agradece a las autoridades argentinas, lideradas por el ministro Luis Caputo y el presidente del Banco Central Santiago Bausili, por su compromiso constructivo y su determinación para restablecer la estabilidad económica y sentar las bases de una economía más sólida y sostenible, que fomente el empleo y la inversión privada en beneficio de todos los argentinos.